Un estudio ha documentado científicamente por primera vez en 110 años la existencia del leopardo negro en África. Varias imágenes del fotógrafo británico Will Burrard-Lucas tomadas en Kenia se han convertido en la primera demostración fehaciente de la existencia de este inusual felino, que ya había sido fotografiado anteriormente, aunque no con tanta precisión. Las imágenes han sido conseguidas gracias a cámaras fotográficas con sensores de movimiento en medio de una investigación en la que han cooperado investigadores del zoo estadounidense de San Diego. El melanismo que presenta el ejemplar fotografiado en la reserva de Loisaba, una hembra, es una mutación genética que oscurece la piel de los portadores.
Ver esta publicación en Instagram
Fe de errores
En una versión anterior de esta información se afirmaba que el leopardo negro había sido fotografiado en África por primera vez en 110 años. El estudio científico al que se hace referencia documenta por primera vez desde 1909 la existencia de este animal y una de las pruebas fehacientes en las que se apoya son las fotografías de Will Burrard-Lucas. Sin embargo, el animal ya había sido fotografiado anteriormente, aunque no con tanta precisión, tal como se explica en este artículo de VERNE.