El 80% de la vainilla vendida en el mundo se produce en Madagascar (en especial en las zonas de clima más húmedo), mientras que en los bosques secos y en la selva húmeda se encuentra una amplia selección de maderas, como el ébano y el palo de rosa, junto con oro, algunos metales preciosos y gemas.
En algunas zonas naturales, la población asciende rápidamente debido al cultivo de la vainilla.