Fuga de presos
Mucho se ha hablado últimamente de las fugas de presos, incluyendo algunas críticas a los guardias civiles y policías encargados de su traslado y custodia, pero no se ha profundizado en lo que hay detrás. La instrucción de la Secretaría de Estado de Seguridad que regula dichos cometidos es de 2009 y ha quedado obsoleta. Deben reducirse al mínimo posible las salidas de internos de los centros penitenciarios, muchos de los traslados podrían evitarse mediante asistencia médica en el propio centro y utilizando las videoconferencias para declaraciones y comparecencias judiciales. Los guardias civiles que realizan las conducciones y custodias de presos carecen de un manual de prevención de riesgos laborales específico, y perciben las retribuciones más bajas de todos los cuerpos de la Seguridad. Pero, hasta ahora, la Dirección General de la Guardia Civil ha hecho oídos sordos al problema.
Rafael Sánchez Madrid
Córdoba
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