
Por qué vacunar es más importante que nunca
Aún hay más de 19 millones de niños sin inmunizar que corren el riesgo de contraer enfermedades potencialmente mortales


Aunque la cobertura mundial de las vacunas nunca ha sido tan alta, aún 1,5 millones de niños mueren cada año por enfermedades prevenibles con ellas. La Semana Mundial de la Inmunización, que se celebra anualmente en la última semana de abril, se propone como por objetivo señalar las acciones colectivas necesarias para garantizar que todo el mundo tenga acceso a la vacunación.
En la imagen, frascos de vacunas pentavalentes (que protegen contra cinco enfermedades infantiles: hepatitis B, Haemophilus influenzae tipo b, difteria, tétanos y tos ferina) antes de ser etiquetados.
Dhiraj Singh / Unicef
Más de 100 millones de niños de todo el mundo son inmunizados cada año contra la tuberculosis, la poliomielitis, el sarampión, la difteria, el tétanos, la tos ferina, la hepatitis B, la 'Haemophilus influenzae' tipo B y, en algunos países, la fiebre amarilla. Estas vacunas permiten salvar aproximadamente 2,5 millones de vidas cada año, según estimaciones de la Fundación Bill y Melinda Gates.
En la imagen, un médico prepara una vacuna contra el sarampión durante una consulta el pasado 16 de abril en Bucarest (Rumanía). Unas 12.000 personas han contraído esta enfermedad desde finales de 2016 en el segundo país más pobre de la Unión Europea y 46 de ellas murieron. Entre las víctimas, hay 39 niños menores de tres años que no habían sido vacunados.
DANIEL MIHAILESCU (AFP)
Más del 70% de los niños no vacunados vive en 10 países. En las regiones menos desarrolladas del mundo, las inmunizaciones suelen ser costosas. A este obstáculo se suma la escasez de suministros y la falta de personal de salud capacitado para administrarlos. La conservación de vacunas también se enfrenta a numerosos problemas, como sistemas de transporte e instalaciones de almacenamiento no fiables.
El grupo yihadista Boko Haram ha interrumpido los esfuerzos para erradicar la poliomielitis en Nigeria, uno de los tres únicos países donde la enfermedad sigue siendo endémica. Los trabajadores de la salud ahora van de carpa en carpa en los campos de desplazados para inmunizar a los niños que no recibieron la vacuna mientras vivían en áreas bajo el control de los extremistas. En la imagen, personal sanitario administra la vacuna contra la polio a niños en un campamento para personas desplazadas en Maiduguri (Nigeria), el 28 de agosto de 2016.
Sunday Alamba (AP)
En todo Yemen, miles de voluntarios van de casa en casa para crear conciencia y brindar asesoramiento a las familias sobre cómo pueden protegerse mejor de cólera y diarrea acuosa aguda, una infección potencialmente mortal. Muhtab Alburaik Salem y su equipo son algunos de los voluntarios que participan en la campaña lanzada por organizaciones internacionales como Unicef, la Organización Mundial de la Salud y el Banco Mundial. En la imagen, el equipo de Salem antes de una visita a un hogar en el distrito de Alburaikah (Yemen), en agosto de 2017.
Entre finales de abril y julio del año pasado, se registraron más de 436.000 casos sospechosos de diarrea acuosa aguda y cólera en Yemen y casi 2.000 muertes en 21 de las 22 provincias del país. Los sistemas de salud, agua y saneamiento se acercan al colapso tras tres años de conflicto y la falta de pagos salariales regulares para muchos trabajadores del sector público ha creado las condiciones ideales para que la enfermedad se propague.
Mutaz Alzekri/ Unicef
La inmunización ha llevado a la erradicación de la viruela, a una reducción del 74% en las muertes infantiles por sarampión en la última década y a la casi erradicación de la poliomielitis. Sin embargo, uno de cada cinco niños en el mundo no está completamente protegido ni siquiera con las vacunas más básicas. Como resultado, se produce una muerte cada 20 segundos por enfermedades prevenibles como la diarrea y la neumonía. Decenas de miles de otros niños sufren enfermedades severas o incapacitantes permanentes.
En la imagen, Rachal, de seis semanas, está a punto de recibir una vacuna oral contra la polio en el centro de salud del campamento de personas refugiadas rohingya de Balukhali en Cox's Bazar (Bangladés) el pasado 28 de febrero.
Cheyenne Krishan / Unicef
Casi 200 países de todo el mundo han respaldado el Plan de Acción Global de Vacunas para salvar más de 20 millones de vidas para 2020 a través de un acceso más equitativo a las ya existentes.
En la imagen, Kelly, de cinco años, está siendo inmunizada contra la poliomielitis en la aldea de Dibobly, en el oeste de Costa de Marfil. Pese a que la medicina es gratuita en el país para los menores de un año, tres de cada cinco niños no reciben vacunas.
Frank Dejongh / Unicef
Antes del actual conflicto, la cobertura de inmunización de Siria era una de las mejores de la región. Ocho años de guerra han hecho que la tasa de vacunación se desplomara del 80% al 41%. Este retroceso ha causado brotes de enfermedades prevenibles, como el sarampión. En la imagen, una campaña de vacunación en el campamento improvisado para personas desplazadas en Mabrouka, en el noreste del país. La falta de servicios básicos de salud, agravados por las duras condiciones de vida, han contribuido a la propagación de enfermedades contagiosas en el campamento.
En el mundo, aún hay más de 19 millones de niños no vacunados o vacunados de forma incompleta que corren el riesgo de contraer enfermedades potencialmente mortales. La Semana Mundial de la Inmunización de este año, bajo el lema 'Las vacunas funcionan' insta los Gobiernos de todo el mundo en invertir más en este ámbito, al mismo tiempo que invita las personas a vacunarse.
Delil Souleiman / Unicef
Mariya, de cinco años, muestra la marca de tinta en el dedo meñique que confirma que recibió una vacuna contra la polio el 17 de abril de 2017 en Islamabad (Pakistán).
Pese a los progresos realizados por algunos países y a la elevada tasa mundial de introducción de nuevas vacunas, hay retrasos con respecto a la consecución de todas las metas relacionadas fijadas por el Plan de acción mundial sobre vacunas con la eliminación de enfermedades como el sarampión, la rubéola y el tétanos materno y neonatal.
Asad Zaidi / Unicef
En algunos países se ha producido un aumento considerable en el número de niños vacunados desde 2010. Algunos de ellos son India, Etiopía, República Democrática del Congo, Bangladés, Filipinas, México, Tanzania, Vietnam, Turquía y Sudán. En India, el número de niños no vacunados se redujo en un 45%, de 5,3 millones en 2010 a 2,9 millones en 2016.
En la imagen, una enfermera comunitaria administra vacunas contra el sarampión y la poliomielitis en un barrio de Kabea Kamwanga, un pequeño pueblo situado a 70 kilómetros al noroeste de Mbuji-mayi, en la provincia de Kasai Oriental, en el sur de la República Democrática del Congo.
Gwenn Dubourthoumieu / Unicef