Una plaza pública para el debate

La pasada semana EL PAÍS celebró en Bruselas el segundo encuentro del ciclo España 40-40. Bajo el título España en Europa: un futuro en común, Juan Luis Cebrián, presidente de EL PAÍS; Antonio Caño, director del mismo; Jean-Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea y Felipe González, expresidente del Gobierno de España, entre otras personalidades destacadas, analizaron el papel que desempeña España en la política internacional y los retos que tiene por delante.

EL PAÍS ha querido tomar el pulso de España, conocer en qué estado se encuentra según el criterio de intelectuales nacionales y extranjeros. Para ello ha iniciado el ciclo España 40-40, pero ¿por qué el diario lleva a cabo un foro como este? "Hoy un periódico es muchas cosas: es un diario tradicional de papel, es digital, es un plató de televisión, un escaparate para comprar y también un lugar de encuentro, una plaza pública", explica José Manuel Calvo, director adjunto de EL PAÍS. El concepto de periódico ha evolucionado no solo por el desarrollo de los medios técnicos, sino por la propia demanda de los lectores. Estos se han vuelto más participativos y exigen la misma actividad al periódico, de ahí que su función como intermediario entre actualidad y sociedad se haya ampliado. 

EL PAÍS ha percibido el auge independentista catalán como la mayor crisis que ha vivido España en democracia y por eso ha centrado parte del segundo de los encuentros del ciclo -el primero fue en Madrid- en este conflicto. Como señala Calvo, "EL PAÍS convoca grandes temas" y "a gente que sabe de lo que habla" para propiciar un intercambio de ideas y servir de "plataforma para el diálogo". "Nos preocupa cómo está afectando esto a la visión de España en Europa, pero también cómo lo están transmitiendo los corresponsales de otros medios. ¿Cuentan con todas las apreciaciones? ¿Qué podemos hacer nosotros?", expone. 

Era de lógica que el debate se trasladara físicamente a Bruselas, centro de la actividad de la Unión Europea, para poder medir mejor las consecuencias. La casualidad hizo más que propicio el escenario, pues Carles Puigdemont eligió esta ciudad para huir de la justicia española. Aunque no todo es Cataluña y en el evento se amplió la mira para hablar de otros nacionalismos europeos y de la integración. 

La organización 

“Este encuentro continúa la línea de los foros globales de EL PAÍS, que organizamos con la participación de las máximas autoridades de gobiernos e instituciones, empresarios y líderes de opinión, con el objetivo analizar la actualidad política y macroeconómica de nuestro entorno”, explica Virginia Béjar, directora de Marketing Institucional y Eventos PRISA NOTICIAS.

La organización del evento, a pesar de contar con figuras de gran calado como Juncker o Mario Vargas Llosa, no se ha salido de los parámetros de otros eventos. No obstante, la directora destaca como novedoso de esta ocasión "que la línea de foros de EL PAÍS sale al exterior y mira hacia Europa con la celebración por primera vez de un evento en la Europa Continental”. Hasta ahora los debates se habían centrado en el ámbito Iberoamericano, una región importantísima para EL PAÍS, pues cuenta con redacción en México y Brasil, así como delegaciones y corresponsales en casi todos los países de habla hispana del continente americano. “Tras un primer foro celebrado el año pasado en Londres para reflexionar sobre el Brexit, esta conferencia supone un paso más hacia la internacionalización de nuestra línea de eventos fuera del entorno de habla hispana y contribuye a la notoriedad de EL PAÍS como medio global”, considera Béjar.