Las nuevas mujeres de la realeza solo se fían de profesionales

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Las nuevas mujeres de la realeza son conscientes de que ser reina o princesa en el siglo XXI supone profesionalizar su cargo. Por ello ya no se rodean de simples damas de compañía, buscan a personas con gran preparación para que les asesoren en su trabajo. Kate Middleton, que poco a poco, está adquiriendo tareas de mayor responsabilidad acaba de contratar a una nueva secretaria privada, Catherine Quinn, una mujer con una sólida formación. Desde que asumió el cargo en octubre de 2017, la sucesora de Rebecca Deacon — que dejó su puesto al casarse— organiza la agenda de la duquesa de Cambridge, supervisa sus discursos y mantiene relaciones con la prensa. También se ocupa de asuntos menores como susurrarle al oído a Kate el nombre y el currículo de las personas a las que tiene que saludar o incluso estar al tanto de que la melena de la duquesa y su maquillaje estén perfectos.

Antes de llegar al palacio de Kensington, Quinn, fue Gerente General de Said Business School, una prestigiosa escuela de negocios en la Universidad de Oxford. Además ha ejercido como abogada en el London Bar, Met Office (Servicio Meteorológico Nacional del Reino Unido), así como en asociaciones de veteranos.

En Dinamarca, donde no cesan los rumores de una cercana abdicación de la reina Margarita, Christine Pii Hansen es desde hace algo más de dos años la asistente de la princesa Mary. Graduada de la Universidad de Copenhague, formó parte de una delegación de la OTAN en Bruselas, trabajó como abogada en el canal TV2 y luego se unió al Ministerio de Relaciones Exteriores en 2004, donde estuvo 11 años. Esta mujer también ha sido abogada de la Corte Suprema en el Comité de Refugiados. Por ello comparte muchas cosas con Mary Donaldson, que ejerció como letrada antes de convertirse en princesa de Dinamarca.

La reina Letizia cuenta con el asesoramiento de José Manuel Zuleta. En él se suma una completa formación militar y un extenso pedigrí aristocrático que le abrieron las puertas de La Zarzuela, donde empezó a trabajar a mediados de los años 90. Pero fue el 25 de junio de 2014, seis días después de la proclamación de Felipe VI, cuando Zuleta, fue nombrado jefe de la Secretaría de la Reina. Antes la esposa de Felipe VI no tenía equipo propio, pero sí que contaba con la ayuda de este, que actuaba siempre bajo la dirección de Jaime Alfonsín, actual jefe de la Casa del Rey y por entonces jefe de la Secretaría del Príncipe. Diplomado de Estado Mayor del Ejército y de Estados Mayores Conjuntos, Zuleta ha realizado el Programa de Liderazgo para la Gestión Pública en el IESE y fue profesor de la Escuela de Estado Mayor. Además ha desarrollado una intensa vida en el ejército que le llevó, por ejemplo, en 2000 a realizar una Misión en el Cuartel General de la SFOR en Sarajevo (Bosnia-Herzegovina). También cuenta con buen perfil aristocrático. Es duque de Abrantes, conde de Belalcázar, conde de Cancelada, conde de Casares, conde de Lences, marqués de Valdefuentes y marqués del Duero.

El apoyo de Zuleta, de 58 años, ha sido fundamental para que doña Letizia se sienta segura y respaldada. Afable y propenso a la sonrisa, el secretario de la Reina ha sabido ejercer de amortiguador de la opinión pública.