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Las montañas de desperdicios europeos que crecen en Asia
Las cantidades de basura electrónica y de plástico alcanzan proporciones épicas en distritos chinos como el de Guiyu, pero todo puede cambiar con una nueva legislación que prohíbe la entrada de algunos residuos
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1Chittagong (Bangladés) es un claro ejemplo de cómo el tratado de residuos afecta gravemente al medio ambiente y salud de las personas. El proceso de reciclaje de desperdicios ha mejorado sensiblemente en los últimos años en el subcontinente indio, pero se sigue realizando a la vieja usanza: a mano, con herramientas muy rudimentarias, y sin ningún tipo de equipamiento de seguridad. La limpieza de los tanques de combustible de los buques que se desguazan deja las playas de Chittagong convertidas en un lodazal negruzco y afecta gravemente a la pesca. -
2Un adolescente dedicado a desguazar barcos posa frente a uno que está siendo reducido a chatarra en Chittagong (Bangladés). Lo que más temen los trabajadores son las bolsas de gas que se forman en los tanques de combustible y que a menudo estallan dejando numerosos muertos. -
3Un adolescente reciclador posa con los pies descalzos sobre las lascas de plástico que le toca clasificar para su reciclaje en Chittagong (Bangladés). -
4El plástico llega en barcazas a mansalva y se descarga a la orilla de un río de Dacca, la capital de Bangladés, para que los trabajadores lo clasifiquen y lo reciclen. La basura que se recicla aquí procede de los cinco continentes. -
5Son sobre todo mujeres y niños quienes llevan a cabo la minuciosa tarea de clasificar los diferentes tipos de plástico antes de que sean procesados en las pequeñas plantas situadas a orillas de un río de Dacca, (Bangladés). -
6Pequeñas instalaciones en Dacca (Bangladés) convierten el plástico en lascas, y un ejército de trabajadores —entre los que no faltan niños— completan el proceso para que diferentes empresas puedan reutilizar el material. -
7El distrito chino de Guiyu acumula montañas de plástico importado que esperan a ser recicladas. Aunque hace un lustro las autoridades ordenaron que los 1.200 talleres registrados en el lugar se uniesen en 29 empresas de mayor tamaño y se mudasen a un nuevo parque industrial dedicado al reciclaje, Guiyu sigue oliendo a plástico quemado y la actividad ilegal resiste aquí y allá. El 1 de enero entró en vigor la nueva normativa china que prohíbe la importación de 24 tipos de residuos. -
8Un niño juega frente a un triciclo repleto de bobinas de plástico para su reciclado en Guiyu. En 2016, el 56% de toda la basura que se movió por el mundo acabó en China. -
9El Gobierno ha exigido a los pequeños talleres de reciclaje de Guiyu que se unan, creen empresas más grandes y profesionalizadas y se muden a un nuevo parque industrial, pero algunas todavía llevan a cabo su trabajo de forma más o menos clandestina. -
10El uso de ácidos para separar metales y la quema de plásticos es una grave amenaza para el medio ambiente y para la salud, razón por la que China ha decidido prohibir la importación de estos residuos.