_
_
_
_

Messi, el niño que no podía crecer

El futbolista ayuda a recaudar fondos al hospital infantil Sant Joan de Deu donde le trataron cuando llegó a Barcelona

Juan Cruz
Messi, en el partido ante el Sevilla.
Messi, en el partido ante el Sevilla.ALBERT GEA (REUTERS)
Más información
La FIFA sanciona a Messi con cuatro partidos en su tortuoso camino al Mundial
Cristiano Ronaldo supera a Messi por primera vez como el jugador mejor pagado
La noche en que Lionel Messi volvió a enamorar a los argentinos

Es difícil ver a Messi haciendo otra cosa en el campo que estas tres: centrar, marcar y dirigirse a lo alto, en memoria de la abuela que lo llevaba a jugar al fútbol. Este último miércoles hizo un gesto más, después de marcar su primer gol ante el Sevilla. Se acercó a la cámara y se puso serio para hacer un guiño que al principio pareció misterioso. Como él es misterioso desde chico (se comunicaba con la maestra cuando era niño a través de una amiga: sentía vergüenza), los comentaristas creyeron que ese gesto, de carapintada (hizo como si se rayara con dos bandas su cara de barbudo pelirrojo) hacía alusión a alguna de sus cuentas pendientes con el club. ¿Qué querrá decir Messi?

La imagen dio la vuelta al mundo y en treinta segundos fue como si no se jugara el partido. Finalmente llegó la explicación: el gesto era una alusión de apoyo a la causa que defiende: el hospital de los valientes que alberga el hospital infantil Sant Joan de Deu, donde le ayudaron a crecer cuando llegó a Barcelona. Ahora Messi ayuda a esa institución, que a él le ayudó a ser quien es en el mundo del fútbol, a recaudar fondos “para construir en Barcelona el hospital especializado en cáncer infantil más importante de Europa”.

Están juntos en ese gesto que responde al hastag #paralosvalientes la Fundación Leo Messi, la Fundación Fútbol Club Barcelona y la escuela de Negocios IESE. El llamamiento de Messi es para hacer ese hospital (que podrá atender 400 personas cada año, en una superficie superior a los 5.000 metros cuadrados). Costará treinta millones de euros. El primero en Europa en su especialidad. Para ayudarles Messi detuvo por medio minuto la conversación sobre su juego y puso a los espectadores en la pista de su propia infancia, cuando era un niño al que le costó crecer.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_