En memoria de los asesinados por el racismo

Hace unos días, el 21 de marzo, fue el día mundial contra la discriminación racial. En esta misma fecha, en 1960, 68 personas fueron asesinadas y 180 heridas por las fuerzas racistas del entonces gobierno segregacionista sudafricano. Es por ello que se eligió este día, en conmemoración a los hombres, mujeres y niñas, que fueron asesinadas por la Sudáfrica del apartheid legalizado.

Hoy, ante la celebración de esta fecha, veo necesario sacar a la palestra el informe para España que realizó el Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial (CERD) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en abril del año pasado para ver qué dice sobre la situación de la comunidad negra de España.

Pero antes que nada ¿Qué es el Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial (CERD)?

Este órgano dependiente de la ONU está formado por expertos y expertas independientes que se encargan de velar por el cumplimiento de la Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial (ICERD) por parte de los Estados que se comprometieron a seguir esta convención.

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Dicha convención fue adoptada por la Asamblea General de la ONU el 21 de diciembre de 1965, y publicada el 7 de marzo de 1966. Y fue el 23 de septiembre de 1968 cuando España se adhirió y al igual que todos los Estados firmantes de la convención, debe presentar informes periódicos al CERD, también las organizaciones sociales pueden presentar textos. Este organismo los examina y expresa sus preocupaciones y recomendaciones al Estado parte en forma de “observaciones finales”.

En abril del año pasado, España presentó los informes 21º, 22º y 23º a este órgano. Su dictamen pasó prácticamente desapercibido, con un seguimiento mínimo por parte de los medios de comunicación que, salvo excepciones morbosas o lejanas, silencia de manera sistemática la lucha contra el racismo. Es la lógica del pensamiento hegemónico de que en España no existe el racismo.

En el documento se aplauden los esfuerzos del Estado español en materia legislativa e institucional – Estrategia Integral contra el Racismo, la Discriminación Racial, la Xenofobia y otras formas Conexas de Intolerancia, la reforma del Código Penal respecto a los delitos de odio y discriminación, la Estrategia Nacional para la Inclusión de la Población Gitana (2012-2020), etcétera.

El CERD señala la falta de esfuerzos del Estado español para dotar de recursos las políticas y los organismos encargados de luchar contra la discriminación racial

Lo aplaudido por el comité se sitúa en los puntos 3 y 4 del informe, en el resto de los puntos, más de 30, se resalta, implícita y explícitamente, la falta de esfuerzos del Estado español para dotar de recursos las políticas y los organismos encargados de luchar contra la discriminación racial y la vulneración de derechos que se están cometiendo, sobre todo, contra la población migrante.

Tienen especial importancia dos puntos sobre las medidas legislativas e institucionales:

1. En el primero se pide al Estado español que se siga trabajando en el proyecto de ley integral para la igualdad de trato y no discriminación. Recordemos que fue parado por el PP en el año 2011.

2. Por otro lado, preocupa al comité la falta de independencia y de recursos de uno de los organismos que debe velar por la lucha contra el racismo, el Consejo para la eliminación de la discriminación racial. Y como apreciación para el debate dentro de este organismo no hay ninguna asociación que represente al espectro asociativo de la comunidad africana y afrodescendiente.

Pero, ¿Por qué es de gran importancia este informe para la comunidad africana y afrodescendiente de España?

Las cárceles racistas (CIE), el presunto asesinato de 15 personas en la playa del Tarajal, la reinstauración del acceso a la sanidad de las personas migrantes indocumentadas, el racismo existente a la hora de la tramitación de las solicitudes de asilo, las llamadas devoluciones en caliente, las redadas racistas, y así un largo etc., son los puntos que desarrolla este documento referidos a aspectos que afectan a la comunidad africana y afrodescendientes de España.

Sólo es posible atender a los problemas específicos que tenemos como comunidad negra en España si, primero, existimos estadísticamente

Sin embargo, son tres, sin lugar a duda, los que suponen un punto de inflexión en el devenir de la comunidad africana y afrodescendiente, estos debemos conocerlos, concienciarnos y difundirlos:

1. Desde el Comité se pide al Estado “perfeccionar herramientas para poder recabar y publicar datos demográficos sobre la composición de la población desglosados por comunidades territoriales y adoptar, con ese fin, métodos adecuados, garantizando la auto adscripción identitaria, y el anonimato”.

Es decir, que existamos como comunidad estadísticamente. Estos procesos ya llevan desarrollándose décadas en Latinoamérica, y es que sólo es posible atender a los problemas específicos que tenemos como comunidad negra en España, si, primero, existimos estadísticamente, y segundo, se realicen estudios para ver, a través de diferentes indicadores sociales, la situación de la comunidad africana y afrodescendiente de España.

La auto adscripción identitaria nos permite nombrarnos a nosotras mismas, construirnos, pensarnos y reflexionarnos, dado que esto no es simplemente poner un nombre en una casilla de un cuestionario hecho por el Instituto Nacional de Estadística (INE), sino que es un proceso comunitario de auto identificación, es decir, un largo camino de pensar colectivo en nuestros espacios. Por otro lado, cuando se pide que se vele por el anonimato se ataca directamente a la excusa principal del Estado español, la Ley de Protección de datos. Durante años las instituciones se han escudado en este mantra para decir que no es posible realizar este tipo de estadísticas, el comité les ha dado la respuesta.También es oportuno señalar que debemos reflexionar nosotras sobre la pertinencia de la realización de estadísticas.

2. Gracias a diversos informes presentados al comité por diferentes asociaciones y entidades pertenecientes a la comunidad africana y afrodescendiente de España se ha dado visibilidad en el documento a una situación durante años silenciada: la discriminación estructural que afecta a la comunidad negra de España.

3. Por último, teniendo en cuenta el Decenio Internacional para los Afrodescendientes (2015-2024) proclamado por la Asamblea General de la ONU, el comité recomienda que se prepare e implemente un programa adecuado de medidas y políticas en el marco de dicho Decenio. Hasta el momento, la única institución que ha hecho una declaración oficial respecto al Decenio es el ayuntamiento de Madrid, a petición del grupo parlamentario socialista, y en concreto, impulsada por el grupo afrosocialista madrileño.

El desarrollo, o no, de las diferentes recomendaciones del comité se valorará en los próximos años, cuando se produzca la entrega de los informes periódicos 24º, 25º y 26 cuya fecha límite de presentación es el 4 de enero de 2020. Hasta entonces, son enormes los esfuerzos que debemos hacer desde la comunidad africana y afrodescendiente de España para que las instituciones españolas tengan en cuenta lo planteado en este informe.

Concluyendo, estas podrían ser algunas de las claves que conformasen el proyecto político que debe nacer desde el debate y la reflexión en los espacios comunitarios, tanto online como presenciales, donde solemos encontrarnos, sobre todo, se hace necesario que difundamos, para la reflexión, entre nosotras este tipo de documentos para velar por el cumplimiento de nuestros derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales.

Debemos seguir conociéndonos para reconocernos, seamos comunidad o sigamos siendo seres pasivos.

En memoria de los millones de personas asesinadas por el racismo.