18 fotosLos grandes iconos del cineUna exposición exhibe a las estrellas más importantes de los filmes del siglo XXCarles GámezValencia - 12 ago 2016 - 03:55CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceBardot en el especial televisivo 'Le Show'. Con el título de 'Show Bardot' la televisión francesa ofrece un programa especial como bienvenida al año 1968. Serge Gainsbourg se encarga de una buena parte de las canciones que componen el espectáculo. Entre las apariciones más celebradas del musical televisivo figura la interpretación del tema “Harley Davidson” con la estrella enfundada en una minifalda y maxi-botas revalidando su posición de 'sex-symbol' y ofreciendo sus últimos grandes destellos como mito erótico.La Galerie de l'InstantBrigitte Bardot, la creación de un mito. A punto de cumplirse los sesenta años del estreno de 'Y Dios creó a la mujer' (Roger Vadim, 1956) el mito Bardot encuentra en el fotógrafo Sam Levin su primer gran proyector. Las imágenes de Bardot semidesnuda con una toalla inundan calendarios, tarjetas, revistas, habitaciones de adolescentes de todo el mundo.La Galerie de l'InstantCatherine Deneuve bajo la sombra de Vadim. Mientras su hermana Françoise tomaba el apellido paterno, Catherine elegirá el de su madre como nombre artístico. Roger Vadim, su pareja sentimental, como ya había hecho con Brigitte Bardot modela su imagen lanzándola como mito erótico en la película 'El vicio y la virtud', pero será su papel como heroína romántica en la comedia musical 'Los paraguas de Cherburgo' el que acabará encumbrándola como estrella popular. En la foto, Catherine Deneuve con una silla de rodaje donde figura el nombre de su hermana.La Galerie de l'InstantEl actor Steve McQueen firma un autógrafo para un joven admirador durante el rodaje de la película 'Bullit' (Peter Yates, 1968). A su proyección como estrella del cine de acción de Hollywood, McQueen suma su imagen como estilizado detective a bordo de su Ford Mustang por las calles de San Francisco.La Galerie de l'InstantElizabeth Taylor. La bella del Sur. La actriz descansaba de sus papeles como heroína romántica en películas como 'Gigante' (George Stevens, 1956) y 'El árbol de la vida' (Edward Dmytryk, 1957) para echar toda la carne en el asador y de paso, ponerse la combinación de la protagonista de la obra de Tennessee Williams, 'La Gata Sobre el Tejado de Zinc Caliente'. Como oponente, un Paul Newman en pijama, objeto de sus deseos y tormentos.La Galerie de l'InstantFaye Dunaway. La boina de Bonnie Parker. El lanzamiento publicitario de la película 'Bonnie and Clyde' (Arthur Penn,1967) estuvo acompañado de la promoción de la moda de los años treinta. Boinas, maxifaldas, trajes a rayas ejecutivas, creados para la ocasión por la diseñadora Theadora Van Runkle inundaron 'boutiques' y grandes almacenes. La alianza cine y moda estrechaba lazos y tejía futuras fraternidades. La imagen de Faye Dunaway servirá de inspiración para estilistas proyectándose en la moda de la calle.La Galerie de l'InstantEl agente OO7 y las primeras chicas Bond. La foto es una de las primeras fotografías publicitarias de Sean Connery como el agente OO7 de la película 'James Bond contra el Doctor No' (Terence Young, 1962) acompañado por las primeras Chicas Bond de la historia entre las que destaca Ursula Andress, que ha dejado su bikini atómico, por un vestido de corte oriental.La Galerie de l'InstantJames Bond. Perfume de mujer. Para las imágenes de promoción de la cuarta entrega de la saga Bond, 'Operación Trueno' (Terence Young, 1965) Sean Connery volvía a aparecer rodeado de las protagonistas femeninas de la producción. En el club de las chicas Bond destaca la actriz Lois Maxwell, la resignada secretaria Miss Moneypenny rivalizando con las otras heroínas y malvadas de la ficción.La Galerie de l'InstantSean Connery. El tormento y el éxtasis. Las 'chicas malas' de la saga James Bond siempre han ocupado un lugar destacado en la iconografía y épica de la serie. Esta vez era la actriz italiana Luciana Paluzzi la encargada de utilizar sus artes más perversas para seducir al agente con licencia para matar y ayuda de postizo capilar para disimular la calvicie.La Galerie de l'InstantJane Birkin, la chica más de moda. Gracias a la película 'Blow Up' de Antonioni y un desnudo visto-no-visto junto al actor David Hemmings, la joven actriz británica conoce la popularidad en medio del tumulto del 'Swinging London'. Al otro lado del Canal de la Mancha le espera el rodaje de la película 'Slogan' (Pierre Glimbat, 1968) y el músico Serge Gainsbourg que acabará cambiando su vida y su carrera artística.La Galerie de l'InstantJane Birkin y Serge Gainsbourg. Escandalosos y familiares. La canción 'Je t’aime moi non plus' los ha convertido en la pareja más transgresora de la música popular de la década de los sesenta. Serge Gainsbourg y Jane Birkin, a pesar de la condena del Vaticano, prohibiciones y censuras, pasean su imagen como la pareja más codiciada por los medios de comunicación ya sea entrando en el restaurante Maxims o jugando sobre una pista de 'karts'.La Galerie de l'InstantJean Paul Belmondo al servicio de Dios. El director Jean-Luc Godard lo había consagrado para la modernidad cinematográfica como juvenil aspirante de gánster en 'A bout de souffle'. Su aparición como párroco rural en la Francia ocupada en la película 'Leon Morin, prête' (Jean-Pierre Melville, 1961), supone un intervalo a la espera de sus papeles como actor y héroe de cine de aventuras a las órdenes de Philipe de Broca. En la foto, Belmondo como el sacerdote Leon Morin.La Galerie de l'InstantLas hermanas Catherine Deneuve y Françoise Dorleac en sus inicios artisticos. Las dos jóvenes actrices principiantes todavía están lejos de aquellas señoritas de Rochefort que bailaban y cantaban por las calles y las plazas de una ciudad cubierta de colores pop. Todavía no han tocado a sus puertas sus respectivos pigmalión: Jacques Demy, François Truffaut, Luis Buñuel, Roman Polanski. Unos años después la tragedia en forma de un mortal accidente automovilístico acababa con la vida de Françoise Dorleac en la autopista de Niza en el verano de 1967.La Galerie de l'InstantMarlon Brando. El hombre deseado. Gracias a películas como 'Un tranvía llamado deseo' y 'La ley del silencio' el actor reina sobre un Hollywood y una industria del cine que se rinde a sus pies. Brando se encuentra en la cima del éxito, su magnetismo, el encanto, la fascinación que ejerce en la pantalla y en la vida ha hecho de él una estrella mundial.La Galerie de l'InstantMarlon Brando. El bello monstruo. Su papel como estibador de los muelles de Nueva York enfrentado a la mafia portuaria le concede su primer Oscar. El actor ejerce de mito rebelde en una industria que desdeña profundamente y que solo unos años después le pondrá la etiqueta de “veneno para la pantalla”. El bello monstruo de Hollywood acabará como un personaje de una tragedia de Shakespeare.La Galerie de l'InstantSteven McQueen y Faye Dunaway. Esa pareja tan estilizada. El paso del tiempo ha consagrado la película 'El caso de Thomas Crown' (Norman Jewison, 1967) como una de las producciones más sofisticadas de la década de los años sesenta. Desde los títulos de crédito realizados por el diseñador Pablo Ferro- luego largamente copiados- al vestuario creado por la diseñadora Theadora Van Runkle para la pareja protagonista, Steve McQueen y Faye Dunaway, colaboran a su consagración como película de culto.La Galerie de l'InstantPalabras de amor. Alain Delon y Romy Schneider a principios de los años sesenta se han convertido en los novios del cine europeo. La actriz austríaca ha dejado atrás su personaje de 'Sissí' a la búsqueda de roles más maduros y complejos. Coco Chanel se ha encargado de su transformación física. Delon encadena películas a las órdenes de Visconti y René Clément. La estación del amor parece no tener fecha de caducidad.La Galerie de l'InstantAjedrez y seducción. La pareja Faye Dunaway y Steve McQueen, él, un multimillonario y ladrón de bancos, ella, una investigadora de una compañía de seguros, protagonizaban la partida de ajedrez más recordada del a historia del cine. La música jazzística de Michel Legrando subraya el vis-à-vis cargado de erotismo entre los dos jugadores que como no podía ser de otro modo finaliza con un apasionado juego de besos en primer plano.La Galerie de l'Instant