La envidia
Antonio Banderas ha manifestado que, en su opinión, los españoles tenemos un pecado endémico. En este contexto, contrasta la capacidad emprendedora de los jóvenes en Estados Unidos con la postura mucho menos activa de la mayoría de titulados universitarios en España. Estas declaraciones y el eco que han tenido son, sin embargo, reflejo de un problema social mucho más grave que la envidia: nuestro profundo complejo de inferioridad. En EE UU, los jóvenes emprenden porque tienen un futuro y un mercado que se lo permite. Allí saben que si su aventura empresarial no funciona, el activo mercado laboral los absorberá en un corto plazo. Obviamente, asumen riesgos, pero lo hacen desde una posición más cómoda y ventajosa. La sociedad española, y en particular los jóvenes, no podemos aceptar e interiorizar un discurso que pone toda la culpa en nuestras espaldas. Si Facebook nació en Estados Unidos y no aquí, no fue por falta de talento, sino por falta de oportunidades.— Ignacio Martín Navarro.