Siete de los diez países más productores de diamantes son africanos. Estamos hablando del continente más pobre. Los yacimientos de esta piedra tan valiosa no revierten positivamente en una población que, como en el caso de Sierra Leona, tiene una esperanza de vida de 50 años y una renta per cápita de unos 400 euros. Es la gran contradicción: inmensa riqueza mineral, enormes desigualdades. Tres países plenamente desarrollados se cuelan en esta lista, elaborada con datos del Banco Mundial y de The Kimberley Process, un organismo internacional relacionado con la ONU que analiza el mercado internacional de diamantes.
En la imagen, una calle de Johannesburgo, Sudáfrica.IstockEn la costa atlántica de África, Sierra Leona fue fundada por el Imperio Británico para albergar a los esclavos liberados. Las áreas de drenaje de los ríos en el sureste del país están plagadas de diamantes. En 2014 logró una producción de 620.000 kilates, alrededor del 50 % de todas sus exportaciones. La extracción se lleva a cabo por empresas privadas, aunque existe una industria artesanal de extracción de diamantes en las llanuras aluviales donde en muchos casos se trabaja en condiciones de semiesclavitud ante la falta de controles. Los diamantes han sido la principal causa de la inestabilidad del país desde 1991, cuando estalló un conflicto armado que se financió en gran medida con la venta de estas piedras.
Hoy en día Sierra Leona se cuenta entre los países más pobres del mundo pese a tener enormes reservas de minerales. La riqueza está repartida de manera extremadamente desigual, y más de tres cuartos de la población vive por debajo del umbral de la pobreza.
Esperanza de vida: 50 años
Tasa de mortalidad infantil: 87 muertes por 1.000 nacimientos
Renta per cápita: 766 dólares (unos 676 euros).
En la imagen, un día cualquiera en Freetown, capital de Sierra Leona.IstockAl sur de África, Namibia es un país desértico poblado por comunidades tribales diferentes. No en vano, existen 13 lenguas oficialmente reconocidas. Durante el período colonial, fue ocupada por holandeses, alemanes e ingleses, y más tarde pasó a estar gobernada por Sudáfrica. Sólo en 1989 eligieron a su primer presidente. Bajo su suelo, Namibia cuenta con ingentes reservas minerales entre las que se encuentran abundantes yacimientos de diamantes. Los cerca de dos millones de kilates que produce anualmente son un aparte muy importante de su PIB. El principal comprador de estos recursos es la Unión Europea, si bien recientemente China está aumentando su peso en la balanza comercial.
Namibia es uno de los países con mayor desigualdad en el reparto de la riqueza, con marcadas diferencias entre la población urbana y la rural. Esta última mucha veces malvive.
Esperanza de vida: 64 años.
Tasa de mortalidad infantil: 33 muertes por 1.000 nacimientos.
Renta per cápita: 5.408,2 dólares (unos 4.766 euros).
En la imagen, una de las dunas de Kolmanskop, ciudad fantasma a pocos kilómetros de Lüderitz, Namibia.GettyLos enormes yacimientos de diamantes de la región atrajeron a finales del siglo XIX al empresario y colonizador británico Cecil Rhodes, que se proporcionó derechos de extracción y se hizo rico con los diamantes, fundando la empresa De Beers, que aún hoy supone más de un tercio del mercado. El país se llamó Rhodesia en su honor, y se convirtió en una colonia inglesa administrada por grandes 'holdings' mineros hasta su independencia en 1980 bajo el nombre de Zimbabue. A día de hoy, la industria de diamantes en Zimbabue está bajo sospecha por algunos informes de abusos o torturas en las explotaciones. No obstante, la UE, presionada por Bélgica, el principal socio comerciante de diamantes, decidió levantar las sanciones a la compra de piedras zimbabuenses.
La inflación en Zimbabue está desbocada y la situación económica del país es precaria hasta el extremo.
Esperanza de vida: 56 años.
Tasa de mortalidad infantil: 47 muertes por 1.000 nacimientos.
Renta per cápita: 931,2 dólares (821 euros).
En la imagen, una de las vistas del puente de las Cataratas de Victoria que atraviesa el río Zambeze.GettyFue colonia británica, y la riqueza de sus minas fue una de las causas de las guerras bóer contra los afrikaners, colonos de origen holandés que tomarían el poder tras la Segunda Guerra Mundial, dando forma al régimen del apartheid racial que Mandela combatió. En el vértice del cono sur, Sudáfrica, al igual que sus vecinos, tiene en los yacimientos de diamantes una de sus principales fuentes de ingresos, si bien la economía del país está más desarrollada y diversificada. La producción de diamantes está controlada casi en su totalidad por la potente compañía De Beers, de Cecil Rhodes (el mismo que se hizo con la de Zimbabue) y la industria emplea a medio millón de personas para extraer los cerca de 7 millones y medio de kilates anuales que logra poner en circulación.
Pese a ser la segunda economía de África con alrededor de un 25% del PIB de todo el continente, existen grandes desigualdades, con importantes fortunas en los centros de negocios y altas tasas de desempleo y pobreza en las áreas más deprimidas. El diamante más grande del mundo fue hallado en Sudáfrica.
Esperanza de vida: 57 años.
Tasa de mortalidad infantil: 34 muertes por 1.000 nacimientos.
Renta per cápita: 6.482,8 dólares (5.724 euros).
En la imagen, el puerto de Ciudad del Cabo.IstockUbicada también en el sur de África, junto a otros notables productores de diamantes, Angola sufrió el colonialismo al igual que sus vecinos. Fue Portugal quién llevó a cabo el proceso. Tras la independencia, Angola se sumió en una cruenta y duradera guerra civil que dejo el país devastado, aunque desde los años 90 la economía ha crecido a buen ritmo, en parte gracias a sus ricos yacimientos de minerales, incluyendo los diamantes. Se calcula que sólo un 40 % del área rica en diamantes ha sido ya explorada, lo que significarían unas valiosas reservas de este material.
El nivel de vida de la mayoría de los angoleños es muy bajo y sus índices de esperanza de vida y mortalidad infantil están entre los peores del mundo. Dado que la mayoría de la riqueza está en manos de un porcentaje muy pequeño de sus habitantes, es un país con grandes desigualdades económicas.
Esperanza de vida: 52 años.
Tasa de mortalidad infantil: 96 muertes por 1.000 nacimientos.
Renta per cápita: 5.900 dólares (5.200 euros).
En la imagen, vistas aéreas de la capital de Angola, Luanda.IstockLa mayoría de los diamantes de los que dispone Australia están localizados en el yacimiento de Argyle, al oeste del país, si bien la baja calidad de sus piedras ha motivado la decisión de desplazar la extracción a otra zonas como Merlin, en el territorio norte. En total, mas de nueve millones de kilates anuales aportan un enorme empuje al PIB australiano.
Hoy en día, Australia posee una renta per cápita ligeramente superior a la del Reino Unido, Alemania y Francia, y una elevada paridad de poder adquisitivo. La nación se encuentra en el segundo lugar en el Índice de Desarrollo Humano llevado a cabo en 2015 por las Naciones Unidas, siendo superada sólo por Noruega. En los años recientes, la economía australiana ha resistido el bajón económico mundial con bastante facilidad. La mayoría de sus exportaciones se realizan a países asiáticos como China o Japón.
Esperanza de vida: 82 años.
Tasa de mortalidad infantil: 3 muertes por 1.000 nacimientos.
Renta per cápita: 61.925 dólares (unos 54.698 euros).
En la imagen, la playa de Bondi, en Sydney, durante una de sus exposiciones marítimas.GettyEl segundo país mas grande del mundo solo descubrió sus ingentes yacimientos de diamante hace a lo sumo 30 años. Una búsqueda intensiva tras encontrar los primeros yacimientos reveló la existencia de grandes cantidades de estas piedras en el norte del país, siendo la mina de Ekati la mayor. Desde entonces se ha convertido en uno de los principales productores de diamantes, que exportan y contribuyen a la riqueza del que es uno de los países más prósperos del mundo.
Su economía está no obstante muy diversificada, y la renta repartida de una manera bastante equitativa. Canadá es uno de los países con mayor índice de desarrollo del mundo. Sus diamantes son considerados “conflict-free”, lo que los hace atractivos para el consumidor dado que por lo menos se aseguran que no están financiando estructuras mafiosas. La producción de diamantes canadienses asciende a doce millones de kilates al año.
Esperanza de vida: 81 años.
Tasa de mortalidad infantil: 4 muertes por 1.000 nacimientos.
Renta per cápita: 50.235 dólares (44.387 euros).
Imagen del lago Abraham, en la provincia de Alberta.IstockSituada en el corazón de África, la República Democrática del Congo, anteriormente llamada Zaire, fue colonizada por Bélgica, que ansiaba acceder a las enormes riquezas minerales de la región. Tras la independencia, la “Guerra Mundial Africana” devastó el país, y fue en gran medida financiada por los “diamantes de sangre” extraídos de manera brutal de los ríos y las llanuras aluviales que salpican la región.
Aún hoy es uno de los países más pobres del mundo, con una renta per cápita muy mal repartida. La inestabilidad y la falta de infraestructuras hacen que se haya reducido drásticamente el comercio con el exterior, y muchas veces se hace bajo cuerda. Los cinco millones de diamantes anuales que logra extraer son en su gran mayoría mediante técnicas artesanales, excavando con las manos y en unas posiciones bastante precarias.
Esperanza de vida: 58 años.
Tasa de mortalidad infantil: 75 muertes por 1.000 nacimientos.
Renta per cápita: 442,3 dólares (388 euros).
En la imagen, habitantes de la ciudad congoleña de Goma.Pese a contar todavía con unos elevados niveles de pobreza, la economía de Botsuana ha crecido sustancialmente desde la descolonización británica, y a día de hoy cuenta con uno de los niveles más elevados de desarrollo de la región. A esto ha contribuido una gestión prudente por parte del gobierno de los ingentes yacimientos de diamantes, que convierten al país africano en el segundo productor de diamantes del mundo. El comercio con estas piedras ha situado a Botsuana en muy buen lugar comparado con otros países productores. En sus yacimientos se encontró el segundo diamante más grande del mundo, de mil kilates, tras el sudafricano, aunque no es nada comparado con los 25 millones de kilates de reserva con los que cuenta Botsuana bajo su suelo.
Esperanza de vida: 64 años.
Tasa de mortalidad infantil: 35 muertes por 1.000 nacimientos.
Renta per cápita: 7.123 dólares (unos 6.291 euros)
Imagen del parque nacional de Chobe, al norte de Botsuana.IstockLíder indiscutible en la producción de diamantes, Rusia extrae al año alrededor de 40 millones de kilates. Sus reservas se concentran en Yakutia, donde están la mina de Yubileiny, Udachny y Mir, las tres mas grandes del mundo. Aunque las primeras investigaciones sobre la existencia de diamantes en Rusia datan de principios de siglo, no fue hasta después de la II Guerra Mundial cuando el gobierno soviético comenzó su explotación para garantizarse la independencia respecto a De Beers, empresa que solía acaparar la producción para disparar el precio de mercado. Y que controló el comercio mundial de diamantes hasta hace relativamente poco. Hoy, Alrosa es la empresa de propiedad estatal que gestiona y dirige las explotaciones, siendo también de lejos el principal productor de diamantes.
Aunque la situación económica en Rusia es aún delicada, lo cierto es que la minería de diamantes todavía tiene un larguísimo recorrido en el país.
Esperanza de vida: 71 años.
Tasa de mortalidad infantil: 8 muertes por 1.000 nacimientos.
Renta per cápita: 12.735 dólares (unos 11.245 euros).
En la imagen, la Catedral de San Basilio, situada en la la Plaza Roja de Moscú.Istock
