_
_
_
_
MIRADOR
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

El rapto de Europa

Cuál es “el perfil de refugiado”. Porque el de árabe y el de norteafricano los conozco, pero el de refugiado es novedoso para mí

Julio Llamazares

Oigo en la radio todavía en sueños (me la debí dejar encendida como muchas noches) a una persona que dice que los agresores de mujeres la noche de fin de año en Colonia eran árabes y norteafricanos “con perfil de refugiados”. Cambio inmediatamente de emisora y están hablando de lo mismo, pero ya en tono menos estridente: la policía alemana investiga las denuncias por agresiones sexuales a mujeres en diversas ciudades del país coincidiendo con la Nochevieja; aunque parece —dice la presentadora— que muchos de los agresores eran árabes y norteafricanos, la mayoría ebrios, “no consta por el momento que fueran actos organizados ni que participaran refugiados entre ellos”.

Mientras me ducho, trato de imaginar cuál es “el perfil de refugiado”. Porque el de árabe y el de norteafricano los conozco, pero el de refugiado es novedoso para mí. Porque ¿todos los refugiados tienen el mismo aspecto? ¿O es que visten igual, independientemente de que sean africanos u orientales, magrebíes o iraquíes, cristianos o musulmanes? Fuera ya de la ducha, mientras me visto, me viene a la memoria la representación de Tiziano de El rapto de Europa, ese mito que dio nombre al continente, y, tras ella, las del rapto de las sabinas por los romanos, también muy representado en la literatura y la pintura europeas, y hasta las del oneroso tributo medieval de las 100 doncellas que los reyes hispánicos hubieron de pagar durante un tiempo a los califas moros de Córdoba para que estos les permitieran vivir en paz y cuyos ecos aún sobreviven en distintas tradiciones y festejos que se celebran por todo el país. El miedo al invasor, en especial al que viene del sur, está grabado en nuestro subconsciente y en él cobra especial dimensión el temor a que rapte o viole a nuestras mujeres, que consideramos nuestros bienes más valiosos e intocables.

A lo largo del día las noticias que llegan desde Alemania van confirmando que, en efecto, entre los agresores sexuales a mujeres la noche de fin de año en Colonia hay refugiados recién llegados al país y la decepción me invade como a muchas otras personas, supongo. ¿Qué decirles ahora a todos esos que se oponen a acoger en nuestros países a los cientos de miles de personas que huyen del hambre y la guerra en los suyos? ¿Con qué argumentos podemos contrarrestar su demonización global de los refugiados cuando algunos de éstos se empeñan en cargarles de razones y de teas incendiarias?

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Pobre Europa, a punto de ser raptada de nuevo por el toro de la irracionalidad.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_