_
_
_
_
Porque lo digo yo
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Miley y el ‘Playboy’

Al ver las fotos de Miley 'full' frontal, chupando una porra de caucho negro y con un gato peludo tapándole la cara, pensaba escribir un alegato en contra de la degradación de la imagen de la mujer

Dolly Parton en la portada de 'Playboy'.
Dolly Parton en la portada de 'Playboy'.

Ser niño prodigio debe ser durísimo. Tan tan duro que uno solo lo deja atrás a base de cocaína, montar broncas, o dar la campanada. Véanse el caso del pequeño ruiseñor, de nuestro querido Justin o de la pizpireta Marisol, devenida en Pepa Flores por mor de una mítica portada de Interviú.

Aquí donde me ven, tirándome el pisto con The Affair -qué gran serie-, lo único que me he tragado desde el episodio piloto hasta la despedida entre lágrimas han sido las nueve temporadas de Friends —esa tele en maquillaje, antes de entrar al plató de Lo + Plus— y, en el sofá, junto a mi hija, los 98 episodios de Hannah Montana. Qué buenos ratos pasamos con Miley, su verdadero padre, Billy Ray Cyrus, y Dolly Parton, la madrina-tía salada, tetona y con banjo. Eso sí que era autoficción, y no lo de Emmanuel Carrère y Houellebecq.

Al ver las fotos de Miley full frontal, chupando una porra de caucho negro y con un gato peludo tapándole la cara (y nada más), pensaba escribir un alegato en contra de la degradación de la imagen de la mujer, pero una es madre; esta criatura solo quería acabar con el rollo Hannah Montana de una vez.

Chica, Miley, si no hacía falta. Yo me pasé a Juego de Tronos hace años, y mi hija ya no ve la tele, solo WhatsApp. Y el disgusto que le habrás dado a la pobre Dolly, que en 1978 fue la única portada (vestida) de Playboy.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_