Problema común
Me mudo a Barcelona para comenzar la universidad. Un thriller aparentemente si miramos la prensa, pero toda una oportunidad para descubrir si esos jóvenes independentistas son tan diferentes a los de la España de donde vengo y de la que quieren separarse. O si realmente sufren el mismo malestar que yo. Padecemos al observar la falta de democracia, la corrupción, el inmovilismo y las falsas excusas. No obstante, no concibo luchar cada uno por su parte contra un problema común. La unión hace la fuerza y necesitamos ser fuertes para afrontar retos que, en ocasiones se esconden tras banderas, y que son en realidad los que deberían tratarse en los Parlamentos.— Rodrigo Senovilla Ganzo.
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