_
_
_
_
Blogs / Cultura
Del tirador a la ciudad
Coordinado por Anatxu Zabalbeascoa

El premio FAD 2015, al rescate de la arquitectura

Anatxu Zabalbeascoa

Casa 1014 en Granollers (Barcelona) de H Arquitectes FOTO: Adrià Goula

En 1998, cuando el aclamado Guggenheim de Frank Gehry había recibido ya todo tipo de reconocimiento crítico y había resituado la ciudad de Bilbao entre los destinos turísticos españoles más solicitados, el jurado del Premio FAD dio un puñetazo sobre la mesa. Lo hizo eligiendo una sobria iglesia del portugués Alvaro Siza -la de Santa María, en Marco de Canavezes- frente al templo del Arte, o de la franquicia artística, levantado con tanto éxito por Gehry.

Por entonces, en el arranque de una década en la que los edificios-reclamo eran solicitados por muchos alcaldes –con o sin contenido, con o sin objetivo- esta institución, que lleva más de medio siglo valorando la importancia transformadora –no solo cultural- de la arquitectura dijo no. Y muchos pensaron que podía ser que sus principios estuvieran por encima de su capacidad de juicio.

A lo largo de los años, y a lo largo de su historia, el Premio FAD de arquitectura lo ha seguido haciendo. Valorando un edificio de viviendas sociales por encima de un museo exquisito o encendiendo la luz sobre una obra menor pero supuestamente iluminadora, ha defendido una idea de la arquitectura basada en la inteligencia y no limitada a los efectos visuales y al componente formal de la disciplina.

Vistos los seis finalistas de 2015, anunciados esta misma mañana, parece que el espíritu del premio tampoco se romperá esta vez. Todos defienden una arquitectura de esfuerzo, ingenio y humildad. Que, además, cinco de ellos sean viviendas también refleja lo que está sucediendo con la arquitectura ibérica. ¿El jurado cree que es la que nuestro país requiere? Su presidente, Víctor López-Cotelo, defiende que “la arquitectura necesita inteligencia, de manera que la belleza sea una consecuencia natural de sus valores. Eso que hoy se trata como ‘humildad’ quizás es parte de la inteligencia, de saber interpretar adecuadamente los problemas. La arrogancia suele acompañar de cerca a la ignorancia. Eso vale para cualquier país. El festejo hortera pretencioso no tiene que ver con saber disfrutar de la vida en cada momento”.

El FAD fue pionero en reconocer el Espacio Público como parte esencial de la calidad de las ciudades. También extendió el examen al interior de los inmuebles y, en esa línea de ir adaptándose a los cambios, por segundo año, ha convocado un galardón para un proyecto de autoría ibérica levantado en otro país. Que esta sección cuente cada vez con más candidatos también habla sobre la nueva arquitectura. Sin embargo, el jurado “internacional” es otro. Y trabaja de otra manera: no visita los edificios seleccionados para poder valorarlos. Este procedimiento, habitual en la valoración de otros premios y en mucha de la información que damos los medios, enfatiza por defecto, la cualidad formal y los atributos visuales de los edificios.

Así, aunque el jurado del FAD cambia anualmente y está compuesto por profesionales que hablan desde posiciones diversas –con frecuencia enfrentadas- siempre ha acabado imponiéndose un espíritu de cordura y de responsabilidad. “Cada uno es responsable de sus actos y es bueno que las diferencias se pongan de manifiesto, para que se sepa dónde está cada uno. Por otro lado, lo que ese jurado juzga no es lo mismo, por lo que habrá que saber leer lo que les acerca o separa en el fondo del juicio emitido”, ha declarado López Cotelo.

Esta es la lista de los proyectos finalistas en la categoría de arquitectura (el resto de los finalistas y seleccionados puede consultarse en la web del FAD). Los ganadores se anunciarán el 2 de julio durante el FAD Fest que se celebrará en Barcelona.

La Casa 1014 en Granollers (Barcelona) de H Arquitectes que abre este artículo.

 Casa Bastida en Begur (Girona) de Bosch Capdeferro. FOTO: José Hevia

3

Centro de investigación ICTA-ICP. UAB. Cerdanyola del Vallès de Claudi Aguiló de Data AE y H Arquitectes.

 FOTO: Adrià Goula

4

Ozadi Tavira Hotel en el Algarve (Portugal) de Campos Costa Arquitectos FOTO: José Campos

5

Casinha no Porto de Paulo Moreira FOTO: Inês Guedes

 y la Casa E/C en las islas Azores de SAMI-arquitectos

En el ámbito internacional los cuatro finalistas son:

 253 viviendas en Ivry-Sur-Seine, (Francia) de Archikubik

Filarmònica Szczecin en Polonia de Barozzi/Veiga.

Museo Serlachius “Gösta Pavilion” en Finlandia de MX_Si Architectural Studio y Huttunen-Lipasti-Pakkanen, arquitectos locales. Así como el puente “Gösta Bridge” de los mismos autores en el mismo lugar.

Comentarios

Hablar como paladín de la inteligencia en nombre de la humildad es contradictorio y muy demagógico. Creo que el presidente confunde prudencia y elegancia con inteligencia. Las obras están bien. Aunque no hay nada brillante bajo ningún punto de vista. Quizás no exista este año ese proyecto que abra puertas. Por otro lado todo el articulo (bueno y el resto del blog) y el mensaje del veredicto tienen un tufillo judeocristiano de culpabilidad que apesta un poco. Es fácil estigmatizar el riesgo y la complejidad en arquitectura desde la complacencia de una periodista de decoración que critica arquitectura por ignorancia con el lector neófito y resentido como palmero.
Yo estoy de acuerdo con que lo más importante sea el reconocimiento a Espacio Público ya que las ciudades se están quedando sin árboles y zonas verdes, miren Madrid, ya se que tienes espacios verdes pero por la acción del hombre cada vez se caen más árboles.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_