El peligro de los selfies
Ante la triste noticia publicada de este matrimonio polaco, que cayó de una altura de 80 metros, cuando pretendía hacerse un selfi desde la orilla del acantilado de Cabo da Roca en Portugal, me viene a la mente un recuerdo que no se me ha borrado.
En un recorrido por los fiordos noruegos, subí al Preikestolen (el púlpito). Es una roca saliente con una caída en vertical de 604 metros. La subida fue de casi dos horas, pero al llegar a la cima te ves recompensado. La vista es imponente. Pero te estremece ver la cantidad de gente que se sienta al borde con los pies colgando hacia el abismo. El primer turista español que cayó en el fiordo desde la cima del Preikestolen, fue el 11 de octubre de 2013. Un joven de 26 años, ingeniero informático.
Todo este tema de los selfies ha empezado medio en broma, pero espero que con el tiempo no se convierta en algo parecido al balconing.— Mª Elisa Aragonés Domènech.
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