No hubo entrevista

En el artículo que Juan Luis Cebrián publicó el pasado 24 de marzo, con motivo del fallecimiento del presidente Suárez, se hace referencia a una entrevista conmigo que los terroristas de ETA habrían propuesto realizar, mientras yo estaba secuestrado, para su publicación en EL PAÍS. La propuesta llegó a mi conocimiento a través de los secuestradores en forma de un cuestionario al que precedían determinados datos que, en nuestra antigua amistad, sólo podían ser conocidos por Juan Luis y por mí mismo, en prueba de la autenticidad del origen de la propuesta.

Aunque en el artículo no se dice que la entrevista llegara a celebrarse, yo quiero subrayar que, en efecto, nunca tuvo lugar. A ella me negué, estimando que una entrevista realizada a un secuestrado en presencia de sus secuestradores no podía ser otra cosa que una farsa innoble. Los secuestradores acogieron con desagrado mi negativa, seguramente porque al fracasar el intento dejaban de hacer la planeada hucha de los tres millones de pesetas. Pero no hubo entrevista.— Javier Rupérez.