Hollande ficha a un experto en rap para que escriba sus discursos

El diario francés Le Monde informa este lunes que "la nueva pluma de Hollande", es decir, la persona encargada de escribir sus discursos (o al menos, de trazar sus líneas maestras), es un experto en el gangsta rap que utiliza el pseudónimo literario Pierre Evil. Y Pierre-Yves Bocquet (su nombre real) lo es ciertamente, como autor del libro Gangsta-rap (Flammarion, 2005) y de las reseñas discográficas realizadas para publicaciones especializadas. Pero no es un experto cualquiera: para el periodista musical Fred Hanak, que trató a Bocquet en la revista Chronic'art y al que cita el vespertino, Pierre Evil es "uno de los tres mejores críticos franceses de rap".

Hasta ahora, Bocquet se desempeñaba como chargé de mission (responsable de área) encargado de la política de protección social. Trabaja en el Elíseo desde 2012, y antes fue asesor de la exministra de Justicia, Élisabeth Guigou, durante el mandato del primer ministro socialista Lionel Jospin. Ahora tendrá un papel muy destacado en la proyección pública del jefe del Estado, de quien se señala su falta de carisma y su falta de protagonismo en momentos clave del devenir político. Si a eso se añade el sempiterno malestar de una parte de la población de origen africano, que tradicionalmente se ha sentido maltratada o ignorada por la Administración, cabe concluir que a Hollande le vendrá muy bien un guionista con sólidos conocimientos de la contracultura urbana y musical.

"Fueron a buscarlos a África. Los arrancaron de sus tierras, los metieron en barcos, los desembarcaron como ganado, allí, del otro lado del Océano, en el país de George Washington y de la Declaración de independencia, sobre esta tierra americana donde no eran más que mercancía, esclavos…". Este texto, precedido por unas imágenes de Malcolm X recordando el sufrimiento de la comunidad afroamericana en EEUU, es la introducción, con voz en off, del documental, un homenaje a la cultura negra y la cultura como forma de resistencia y toma de conciencia.

"He leído el artículo de Le Monde, y es divertido ver cómo la prensa presenta a Pierre Evil como un especialista en rap. De hecho, su cultura es mucho más vasta", afirma Vecchione. "El productor de Program 33 Thomas Thery nos puso en contacto para el documental, porque yo necesitaba a alguien para desarrollar el texto del guión que había esbozado. Pierre es alguien que escribe extremadamente bien, muy preciso y detallista, y ese tema le apasionaba".

Sobre el crítico y asesor de Hollande, el realizador asegura que "su cultura musical no se circunscribe al rap: es un apasionado de la música en general, y un verdadero experto en la música negra estadounidense en particular".

Cinco años antes, Bocquet contó en gangsta rap la historia de una fascinación: la que conquistó progresivamente el mundo a finales de los 80 y que vio a un puñado de postadolescentes salidos de los ghettos de Estados Unidos —Dr Dre, Ice Cube, Snoop Dogg, Tupac Shakur…— transformarse en estrellas de la música, la moda, el cine y los videojuegos; [una fascinación] que vio cómo esas figuras sustituyeron a los Malcom X o los Che Guevara como iconos de una cierta juventud rebelde", según anuncia la cubierta del libro.

En las declaraciones de Fred Hanak recogidas por Le Monde, el periodista afirma que Pierre Evil tiene "un talón de Aquiles: conoce muy bien el rap americano, sobre todo de la Costa Oeste, pero no le interesa el rap francés". Y aprovecha para hacer un comentario político al afirmar que "es un poco como el Jacques Chirac [expresidente francés conservador] de la crítica de rap: de la vieja escuela, excelente en política internacional y deplorable en política nacional".

La pluma de Bocquet también fue reclamada para colaborar en el libro-catálogo de la exposición Dennis Hopper and the new Hollywood que tuvo lugar en la Cinémathèque Française [en 2008.

A finales de marzo está prevista la publicación del último libro en el que ha colaborado Pierre Evil: 'Detroit Sampler', editado por Ollendorff & Desseins, es una obra de 530 páginas "que levanta el capó de la Motor City y revela toda su mecánica rítmica y sonora, más allá del sonido Motown", según la editorial. En su blog, el editor afirma: "Nuestro especialista en black music preferido, Pierre Evil, cuya colaboración habíamos conseguido a precio de oro a través de un intermediario maltés después de sesenta reuniones secretas, es en realidad ¿un alto funcionario de la República? ¡Estupefacción! ¡temblores! ¡pavor! Pierre Evil era un pseudónimo?".