Empieza la cuesta de enero

Las Navidades quedaron ya lejos y lo único que les queda a algunos son esos kilitos de más y alguna que otra indigestión. Como todos los años, y para no variar, en todas las televisiones se repiten una y otra vez los mismos temas para comenzar bien el nuevo año; apuntarse a un gimnasio, dejar de fumar..., etcétera.

Pero… ¿Y si ya te hubieras cansado de que te agobien con cientos de mensajes de cómo tienes que empezar el año? Basta ya de reportajes que se repiten año tras año con absurdas fórmulas para que tu año no sea tan patético como el anterior, de muletillas usadas hasta la extenuación como “esos kilitos de más” o “propósitos para empezar el año con buen pie”.

Estamos hartos de escuchar una y otra vez la vieja y oxidada cinta sobre la cuesta de enero. No todos nos hemos gastado lo que no tenemos en pasar las Navidades, ni tampoco hemos comido hasta atiborrarnos de turrones y lechona. Algunos queremos poder comer el postre mientras vemos las noticias sin remordimientos de conciencia, al tiempo que la nutricionista de turno de este año sale diciendo exactamente lo mismo que sus predecesoras sobre cómo seguir una dieta equilibrada para perder “esos excesos navideños”.— Raquel Castro López.