Ortega Cano: “Por mi alma que no bebí”

José Ortega Cano se pregunta cómo la gente puede creer que ha querido matar a una persona. Se quiebra. Vuelve a negar que bebió alcohol el día del fatídico accidente en que murió Carlos Parra. Y habla del dolor que le causa ver la imagen que se está dando de su hijo, que permanece en prisión desde mediados de noviembre. Todo esto ocurre en la primera entrevista que dio en televisión el viudo de Rocío Jurado tras conocer el fallo definitivo de la Audiencia de Sevilla, que lo sentencia a dos años y medio de cárcel. Sus palabras fueron emitidas la madrugada de este miércoles por Antena 3, pero la conversación fue grabada el pasado lunes.

“Era una noche muy oscura, una noche muy triste. Recuerdo todo. Desde que salí de Castilblanco de los Arroyos. Llevaba a mi hija a casa de unos amigos. Estaba un poco cansado porque había sido un día de mucho calor, pero iba a llevar a mi hija. ¿Cómo yo iba a beber?", se pregunta el torero en la grabación. E insiste en que no consumió alcohol en las horas previas al suceso. “Lo digo con toda honradez y por mi alma, que ese día no bebí. No he cometido un asesinato. He tenido un accidente con un coche y quiero que quede bien claro ¿Cómo pueden pensar que yo quiero matar a una persona?".

En cuanto a la muerte de Carlos Parra, Ortega Cano asegura que para él hubiese sido mejor perder su propia vida antes que cargar con la responsabilidad de su deceso. “Yo me quería morir (…). Hubiera dado mi vida antes que la de él y lo lamento profundamente. Rezo todas las noches por él”. Además, se refiere a los testigos que durante el juicio lo acusaron de estar borracho la noche de los acontecimientos. “Mintieron como dos bellacos. Estaban pagados por alguien y no solo ellos, alguno más también y se sabrá”.

Tampoco evita el tema de la encarcelación de su hijo José Fernando, de 20 años, que permanece en prisión desde mediados de noviembre, acusado de cuatro delitos tras robar un coche y prenderle fuego. “No quiere llamarme, pero Gloria me ha dicho esta mañana que José va a cambiar de vida y que quiere estar conmigo”, dice, refiriéndose a su otra hija, Gloria Camila, menor de edad. “No puedo verlo por televisión porque me rompo en mil pedazos. No es la imagen que han vendido de él. Es muy buena persona”, asegura.