Bonnie Tyler concursará en Eurovisión

El próximo 18 de mayo, Bonnie Tyler pasará de entonar sus conocidas canciones de los años ochenta en giras por Europa y programas de televisión británicos a cargar sobre sus hombros el peso de representar al Reino Unido en el escenario de Malmo (Suecia) en el que se celebrará Eurovisión. La cantante de 61 años, más conocida por la canción Total eclipse of the heart que la lanzó a la fama en 1983, concursará con el tema Believe me in me, compuesto por un estadounidense (Desmond Child, autor del éxito de Ricky Martin Livin’ la vida loca y colaborador habitual de Tyler) y dos británicos. Se convertirá así en uno de los nombres más conocidos que verán los 120 millones de espectadores que se calcula que seguirán la gala. Pero, sobre todo, se convertirá en protagonista de uno de los momentos más públicos de su carrera en los últimos años.

“Me siento verdaderamente honrada de poder representar a mi país en Eurovisión y sobre todo con una canción tan fabulosa”, ha expresado la cantante en un comunicado. “Prometo dar todo lo que tengo en nombre del Reino Unido”.

La elección de Tyler parece denotar más interés en realizar un despliegue de músculo musical que en erigirse ganadores del festival. Eurovisión tiende a favorecer a artistas jóvenes con un sonido contemporáneo, como el Euforia de Loreen que ganó el año pasado. Pero el Reino Unido tiene por costumbre no seguir las modas del concurso sino sacar a relucir a sus viejas glorias de renombre año tras año. Les funcionó en 1997, cuando Katrina and the Waves no solo les dio su última victoria con Love shine a light, sino que se convirtió, con 227 puntos, en la canción más puntuada de la historia de Eurovisión. Sin embargo, cuando el año pasado aplicaron la misma fórmula y desempolvaron a Englebert Humperdinck para la ocasión, el resultado fue diametralmente opuesto: quedaron en el puesto 25 de un total de 26. A esta derrota cabe achacarle el pesimismo palpable en el Twitter británico esta mañana, que recibió la noticia con juegos de palabras sobre los grandes éxitos de Tyler, como Holding out for a zero (Esperando un cero en lugar del consabido Holding out for a hero), Total eclipse of the votes (Eclipse total de votos en lugar de Total eclipse for the heart) o Lost in Sweden (Perdida en Suecia, una variación de su primer éxito, Lost in France, de 1976).

Pero si de lo que se trata es de recordar al mundo cuántos grandes artistas han salido del Reino Unido y reclamar prestigio por agravio comparativo frente a los relativos desconocidos de otros países, Tyler es una decisión más que correcta. La cantante galesa sigue siendo una intérprete muy querida en Europa. La gira en la que se encuentra ahora inmersa en Alemania y Suiza está resultando un relativo éxito y en Estonia todavía consigue reunir a miles de personas dispuestas a escuchar los temas de Jim Steinman que la lanzaron a la fama hace tres décadas.