Precisión sobre Caja Madrid

En su edición de ayer sábado, en el artículo titulado Rato considera el plan de Bankia una 'inyección brutal' a costa del Estado", Miguel Ángel Noceda hace una interpretación de mi ausencia del Consejo que quiero rectificar. Para ello, considero necesario realizar las siguientes aclaraciones:

1.- Mi ausencia a la reunión del Consejo se debió a que me encontraba en un centro médico a 420 kilómetros de Madrid, acompañando a mi padre, en tratamiento médico por graves problemas de salud, tal como notifiqué al secretario del Consejo, con delegación de voto explícito sobre estos puntos al presidente y que comuniqué personalmente a otros compañeros del Consejo.

2.- Respecto a los acuerdos sometidos y aprobados por unanimidad en el Consejo, no solo me identifico plenamente con los mismos, sino que participé activamente junto a otros consejeros en su impulso y proposición previa.

3.- En cuanto al informe técnico distribuido por el presidente del Consejo, Rodrigo Rato, deseo manifestar de manera inequívoca que no solo comparto las observaciones críticas referidas al método y criterios de estimación de las depreciaciones potenciales y las correspondientes necesidades de provisionamiento de BFA/Bankia, y a las negativas consecuencias que tal sistema de valoración tendrá para el sector bancario y para la recuperación del flujo de crédito en la economía real, sino que como tuve ocasión de manifestar en el Consejo de Bankia, tal sistema de valoración conducía a un "sobreprovisionamiento" de los balances de Bankia, a costa de una reformulación a la baja —hasta llevarlas a pérdidas— de las cuentas de 2011.

4.- Finalmente, en relación con la especulación sobre mi "cercanía a las directrices del PP en la caja", quiero dejar constancia, como he manifestado cada vez que he tenido ocasión y bien conocen mis compañeros de Consejo, de mi radical desacuerdo tanto con la gestión del Gobierno en la inducida crisis de Bankia, como con los fundamentos teóricos e instrumentación de la reforma financiera desplegada por el Ministerio de Economía a través de los reales decretos 2/12 y 5/12. — José Antonio Moral Santín. Madrid.