Tumbonas a un euro en Madrid Río
El Ayuntamiento adjudica el primer quiosco a la misma empresa que ganó las cafeterías.- Abrirá entre el 15 y el 20 de julio con baños de uso público
Alquilar una tumbona en la llamada playa de Madrid Río durante todo el día costará un euro. El Ayuntamiento de la capital ha adjudicado el primer quiosco que abrirá sus puertas en el parque lineal del Manzanares, que incluye servicio de restauración básico (refrescos, bocadillos, café...) y el alquiler de tumbonas situadas alrededor de las tres láminas de agua del parque de la Arganzuela. Como el Consistorio ya tiene construido el establecimiento, de 66 metros cuadrados, más otros 100 de terraza alrededor, prevé que la empresa concesionaria pueda abrirlo en breve, entre el 15 y el 20 de julio. La oferta mejoró y mucho el canon inicial que pedían los pliegos, pero además el Ayuntamiento ha valorado la relación calidad-precio que ofrezca el quiosco a sus clientes.
Una misma empresa gestionará todos los establecimientos de hostelería de Madrid Río, al menos los primeros cinco para los que el Ayuntamiento de Madrid ha sacado concurso público. Después de adjudicarle dos cafeterías y dos restaurantes que abrirán en otoño, el Consistorio ha considerado que la mejor oferta para el bar y el servicio de tumbonas del parque de la Arganzuela la ha presentado la empresa Casa Remigio. No es extraño que la haya preferido a las otras seis que se presentaban, puesto que ha mejorado el canon inicial que pedía el Ayuntamiento. En lugar de los 25.050 euros del concurso, la firma ha ofrecido 37.000 euros, es decir, un tercio más.
Casa Remigio gestiona en Madrid otros restaurantes, entre ellos el de mismo nombre, de cocina tradicional, el Castellana DF, sitio de moda entre el pijerío de la zona del Bernabéu, y el Irish Corner, un bar estilo irlandés en Arturo Soria. Los responsables de la empresa aseguraron a EL PAÍS hace unos días que su previsión era poder abrir el bar con servicio de tumbonas durante la primera quincena de julio, incluso el día 10. A diferencia de los otros cuatro establecimientos, en este caso la infraestructura la construyó el Ayuntamiento. Lo único que tienen que hacer es montar la cocina y llevar el mobiliario y empezar a trabajar.
Cuando abra el bar, situado justo al lado de una de las tres láminas de agua que forman la llamada playa de Madrid, se solucionará en parte uno de los problemas de Madrid Río, la ausencia de baños públicos en toda la extensión del parque. El quiosco contará con un urinario que se podrá usar libremente, incluso si no se consume, según ha explicado el Ayuntamiento.
La adjudicación del paquete de cuatro cafeterías se produjo de manera directa a la empresa Casa Remigio. El Consistorio había sacado dos veces a concurso público su gestión, pero ningún empresario se interesó en firme alegando problemas de financiación. Después de quedar dos veces desierto (en septiembre de 2010 y en febrero de 2011), el concurso se resolvió a favor de Casa Remigio.
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