Historias de buceo en Aqaba (Jordania)
Llevo un par de días buceando en Aqaba, quizá el destino para submarinistas más peculiar del mundo. Porque como ya comenté en el post anterior, Jordania es un país trazado sobre un gigantesco desierto, con solo 24 kilómetros de costa sobre el Mar Rojo.
Pese a tan exiguo territorio marino, los fondos de Aqaba ofrecen a los submarinistas un buen resumen de las excelencias del Mar Rojo, incluidos arrecifes de coral bellísimo y en buen estado de conservación.
Obviamente, no se puede comparar con el Mar Rojo desde Egipto. Allí hay muchas más aguas territoriales y muchos más kilómetros de costa como para ofrecer mayor diversidad de puntos de buceo. Tampoco hay en Aqaba grandes animales; en siete buceos solo he visto una tortuga y un pequeño tiburón.
Pero si estás de visita por Jordania y te gusta bucear, dejar los últimos dos o tres días para conocer los fondos submarinos de Aqaba podría ser una forma estupenda de rematar el viaje.Hay buenos arrecifes de coral, pocas corrientes, mucha vida pequeña y buceos muy sencillos (ideales para principiantes) porque todos están muy cerca de la costa. Y también paredes qu se hunden en el azul para buzos con gana de marcha.
Estos son algunos de los puntos de buceo que más me han gustado:
Es el pecio más famoso de Jordania. Un viejo carguero de fosfatos (de origen español) hundido a propósito en 1986 para crear un arrecife artificial. Es un gran barco, todavía en muy buen estado de conservación y muy accesible porque solo está a 25 metros de profundidad y muy cerca de la playa. Los corales ya han empezado a colonizar sus hierros oxidados.
Power Station
De lo que más me ha gustado. Una pared de coral que se hunde varios centenares de metros… pero que queda solo a una veintena de la playa y de una carretera. Desde luego, el punto de inmersión más raro que he visto en mi vida. El jardín de coral que vive en la parte alta es impresionantemente bonito y compacto. Luego el cantil se desfonda y se hunde en la negritud. Y puedes volar durante metros y metros con el Gran Azul a un lado y una pared llena de corales, al otro.
Acuarium
Un lecho en fuerte pendiente en el que se alternan bandas de arena con otras de coral en muy buen estado y muy compacto. Mucho coral fuego y corales blandos.
El tanque
Otro pecio curioso. A la vez que el Cedar Pride, se hundieron tres viejos carros de combate en otros tantos lugares para aumentar la oferta de atractivos para submarinistas en vista de que en esta zona no había ningún naufragio destacable. Este tanque está a apenas 5 metros de profundidad y es accesible incluso en apnea. Pero resulta curioso y fotogénico.
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