El Ayuntamiento de Madrid derriba tres viviendas en la Cañada
A pesar de que había una convocatoria de la plataforma Stop Derribos, no ha habido resistencia.- Ayer sí se paralizó la demolición de dos casas
Tres construcciones y la mitad de una cuarta, ilegales según el Ayuntamiento de Madrid, han sido demolidas hoy en el tramo de la Cañada Real Galiana que discurre por el distrito de Vicálvaro de la capital. De los cuatro derribos, tres han sido llevados a cabo por el Servicio de Disciplina Urbanística del Consistorio y uno, la mitad de un edificio, por sus propios ocupantes. La acción contaba con la autorización judicial y se ha complementado con un operativo del Samur Social para asistir a los ocupantes de las infraviviendas demolidas.
A pesar de que ayer los indignados y la plataforma Stop Derribos consiguieron detener el derribo de dos viviendas en el sector VI de la Cañada Real, y que había una convocatoria para hoy para evitar el derribo de estas viviendas, no hay constancia de que haya habido incidentes.
50 vecinos no han logrado evitar el derribo en la Cañada, el poblado chabolista mas grande de Europa, ya que ha habido dos cordones policiales para cortarles el paso. Los derribos han empezado a las seis en una vivienda del sector IV de cuyo derribo no tenían conocimiento los vecinos que se han movilizado. Luego han derribado dos viviendas en el numero 38 y 38C del sector III, "a pesar de que no tenían permiso judicial para el derribo de la vivienda 38C", según informa el abogado Javier Rubio, que lleva casos de familias que quieren evitar derribos en la Cañada. "Ha sido muy duro ver como a dos familias les han destruido sus casas delante de sus narices", dice Ana, una de las ciudadanas que a "titular personal" ha querido sumarse a estas movilizaciones sociales.
Un vecino, cuya mujer esta recibiendo quimioterapia, ha negociado con el Ayuntamiento derribar él mismo la mitad de su vivienda, y ha acordado con el Ayuntamiento que se mantenga el salón y el baño mientras su mujer esta recibiendo el tratamiento.
Según el Ayuntamiento se trataba de construcciones ilegales construidas sobre terrenos de dominio público, no susceptibles de apropiación ni de construcción por los particulares. El Ayuntamiento ha ofrecido a los residentes en las infraviviendas recursos como el acogimiento temporal y la red municipal de servicios sociales, aunque sólo los ocupantes de una parcela han mostrado interés en su utilización.
Las actuaciones de disciplina urbanística, como la ejecutada hoy, son simultáneas a la elaboración del censo de la Cañada Real que discurre por el término municipal de Madrid, que comenzó el pasado 1 de junio.
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