Carlos Fabra, en su regreso a la vida política: "No dimito porque soy inocente"

"No dimito porque soy inocente". El presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, ha reaparecido hoy públicamente entre más de un millar de militantes del PP para reiterar que no ha dimitido, ni piensa hacerlo, porque, dice, "soy inocente". Fabra se apartó de la vida política hace seis meses para ser sometido a un trasplante de hígado. Su única aparición pública desde entonces fue en septiembre, cuando acudió a declarar ante el juzgado número 1 de Nules por un procedimiento en el que está imputado por los presuntos delitos de tráfico de influencias, cohecho y cinco fraudes fiscales. Hoy ha regresado acompañado por el presidente del PPCV y presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y por cinco consejeros del gobierno valenciano. "Cómo os he echado de menos", ha dicho Fabra en su reaparición ante la militancia popular.

El acto, convocado bajo el lema "Por Castellón" y con el método de organización de una convención provincial, ha sido una exaltación a la gestión de Carlos Fabra durante sus 16 años al frente de la Diputación. "En 200 años de historia, nunca un líder político ha hecho tanto por la provincia de Castellón", fueron algunas de las palabras que le ha dedicado Camps que, además, ha indicado que "sin metáforas ni retórica, Carlos Fabra se ha dejado la vida por la provincia de Castellón".

Tanto Camps como Fabra hablaron en plural al referirse, aunque de forma sutil, a los procesos judiciales a los que están sometidos. "Tienen especial fijación contigo y conmigo", ha dicho Fabra. "Ante las insidias y los ataques de los que tenemos enfrente siempre encontrarás el cariño de la gente", ha mantenido Camps.

Al margen de las críticas al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y del balance de las inversiones en la provincia de Castellón, el acto de regreso de Fabra a la vida pública ha servido para que el presidente de la Diputación designe a su "heredero", el vicealcalde de Castellón, Javier Moliner.