Las muestras de ADN del acusado de violar a dos mujeres en Salt se tomaron sin autorización judicial

Las muestras de ADN de Abdelouahid el Ahimoud, acusado de agresión sexual continuada a dos mujeres y de abuso a una fisioterapeuta, se tomaron sin autorización judicial, según ha declarado hoy ante la Audiencia Provincial de Girona un Mossos d'Esquadra. El agente intervino en la cadena de custodia de dos vasos de los que bebió el hombre y que sirvieron para extraer su ADN. El detenido se negó a facilitarlo voluntariamente. El fiscal pide para él 38 años de cárcel.

Los Mossos d'Esquadra pidieron la autorización judicial para tomar las muestras al juzgado de instrucción encargado del caso, pero éste la denegó por una cuestión competencial. Los agentes solicitaron de nuevo el permiso para tomar las muestras al juzgado correspondiente, pero antes de obtener la respuesta afirmativa, se hicieron con dos vasos de cartón en los que había bebido el acusado y los enviaron a analizar. La defensa, ejercida por Benet Salellas, quiere que se invalide la prueba. El tribunal se pronunciará sobre este tema cuando dicte sentencia.

El abogado de la acusación particular, Carles Monguilod, sostiene que es posible tomar muestras de un detenido sin autorización, basándose en sentencias del Tribunal Supremo. Pero que en cualquier caso, confía en otras pruebas que incriminan a Abdelouahid, como que tuviera el móvil de una de las víctimas y se lo vendiera a su compañero de piso por 30 euros. Tampoco le servirá al acusado el argumento de que bebió directamente del grifo, no de los vasos. Un mosso confirmó ayer que en los calabozos de Girona no hay grifos.

La lista de delitos que pesan sobre Abdelouahid es larga: agresión sexual continuada, detención ilegal, abuso sexual, lesiones, hurto y obstrucción a la justicia. El Ministerio Fiscal le acusa de haber agredido sexualmente a dos mujeres en 2008. Según sus calificaciones, las violó de manera continuada en unas barracas de Salt y les dejó secuelas. También le imputa un delito de abuso sexual contra una fisioterapeuta a la que supuestamente toqueteó y amenazó. La defensa pide la libre absolución porque asegura que el hombre es un enfermo mental y que además en aquella época consumía drogas, lo que empeoraba sus capacidades.