De vacas por Madrid
Desde esta noche más de un centenar de bóvidos pastarán por la ciudad
Además del mamífero que da leche y carne, las vacas son desde hace años también arte. La primera vez que los bóvidos tomaron la calle y sirvieron como lienzos tridimensionales fue hace ya una década, en Zurich, y desde entonces la Cow Parade ha recorrido decenas de ciudades para llegar mañana a Madrid. Las más de cien vacas decoradas serán colocadas esta madrugada en las principales avenidas, plazas y parques de los distritos Centro, Salamanca y Retiro y pastarán en esos sitios hasta el 16 de abril. Para poder irse de vacas por Madrid, por supuesto gratis (los animales están en la vía pública) la organización distribuirá un millón de planos con la ubicación exacta de todos los ejemplares.
"Hemos colocado las vacas de forma que la gente pueda salir de ruta por los lugares históricos de Madrid para verlas. Se ha tenido en cuenta, la visibilidad -no todas caben en cualquier esquina-, la comodidad de los viandantes para no obstaculizar el paso, la estética y la seguridad de los animales", afirma José Cardoso, director de organización de Cow Parade Madrid.
Cada paso por las ciudades donde aterriza esta peculiar manada es diferente, ya que sus artistas decoran ex proceso las vacas según la ciudad. Así según las tascas, Cibeles u otras fuentes, arte y referencias culturales de cada urbe, los mamíferos toman unas formas u otras. El número creciente de vacas -hay más de 5.000 vacas pintadas en todo el mundo- se explica porque tras su exhibición, los mejores ejemplares se subastan entre todo aquel que pueda mantenerla (en Francia, un coleccionista privado presume de tener 13). El precio de salida de cada una de ellas estará entre 1.500-2.000 euros y los beneficios se destinan a organizaciones sin ánimo de lucro.
Los pintores de animales han sido tanto artistas reconocidos como ciudadanos anónimos. La organización convocó un concurso abierto a todo el público para que cualquier creador pudiera exponer. El Círculo de Bellas Artes de Madrid colaboró con la institución para garantizar la calidad plástica de las propuestas finales. Así, el jefe de toda la manada, José Cardoso, señala que aproximadamente un 80% de las vacas pertenecen a aficionados y el 20% restante a artistas profesionales. Todos ellos, de forma decimonónica cobraban lo mismo: 600 euros como apoyo para los materiales, y todos debían inspirarse en temas vacunos a la hora de pintar.
Mari Luz Peñalver, diseñadora gráfica, de 25 años, convenció al jurado con una vaca vista desde dentro: "Se llama XRay y está preñada. Yo he visto siempre las vacas muy ligadas al ser humano desde un punto de vista estrictamente maternal, por la leche y alimentación". Alessandro di Daniel Matteo, diseñador industrial, de 33 años, quiso aprovechar su peculiar lienzo para hacer una llamada sobre la escasez del agua y en un ser mitológico, con alas, cabellera de león y unas ubres en las que ha escrito H2O, señala a todo aquel que se acerque que el futuro está en el agua.
EL PAÍS, como una de las empresas patrocinadoras de esta iniciativa, también ha puesto una vaca en la calle. La artista Alicia Estefanía fue la encargada de vestirla a base de un gran collage hecho con noticias de periódico. "Me puse la vaca en la cabeza y empecé a pensar en cosas y asuntos que pudieran irla bien y hablar su lenguaje. Busqué temas como las vacas locas, las cuotas de leche, asuntos de San Fermines y toros...y otros titulares que fuera de contexto tuviesen gracia. Creo que el resultado es muy divertido. La vaca muuuuuy informada, que es como se llama, permite quedar con los amigos a mirarla, contemplarla durante un tiempo y reírte", afirma. El grafittero Suso33 utilizó una mancha de pintura -claro elemento de su tipo de arte- en el abdomen del animal para hacer pensar sobre lo que el diseño resuelve y el arte plantea. Alfonso Berrido, Antonio Alvarado o Sean Mackaoui son otros de los artistas que han puesto color a los animales que desde esta mañana han amanecido en Madrid.
Y si en estos días en las calles de Madrid, las vacas sufren algún daño, la organización ha previsto un ambulatorio para ellas. La manada tendrá a su disposición el Hospital Universitario Infantil Niño Jesús. Los enfermeros serán los alumnos de la Escuela Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Madrid. Por último, y para involucrar a los más pequeños, Cow Parade también llegará a los colegios con actividades y talleres para que ellos también puedan caracterizar sus propias vacas.
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