_
_
_
_
Reportaje:

"El centro del pueblo es una olla exprés"

Malpica de Tajo (Toledo) ha registrado las temperaturas más altas de España en la ola de calor.- Sus vecinos cuentan como sobreviven con remedios caseros

Las persianas de la casa de Olvido González permanecen cerradas hasta que cae el sol en Malpica de Tajo (Toledo). Los ventiladores no descansan un solo minuto y el frigorífico, repleto de agua y zumos, se ha quedado pequeño para mantener toda la comida y bebida que ha comprado su dueña antes de la ola de calor. Esta escena es más que una rutina en todas las viviendas de este municipio toledano que tiene el honor o la desgracia de haber registrado las temperaturas máximas más altas en los últimos cinco días.

Olvido no ha sucumbido al aire acondicionado. Confía en que los trucos de "toda la vida" le ayuden a pasar el verano más largo de su vida. "Yo no me fío de esos aparatos, mi marido y yo somos mayores y aguantamos como podemos estos días", asegura. Son muchos los vecinos del municipio que no han instalado un aparato de aire acondicionado en casa. El alcalde de Malpica de Tajo, José Gómez, afirma que no es el remedio preferido para soportar el calor en el pueblo. "Las personas mayores desconfían y optan por reducir la temperatura de sus domicilios de la forma más tradicional", señala. José Antonio Mocha, vecino de Malpica, lo ratifica: "No me gusta, no lo pongo ni en el coche".

Más información
La ola de calor africano se mantendrá hasta el jueves
La ola de calor remite

Otros vecinos apuntan a la novedad de las altas temperaturas para explicar la falta de preparación de sus viviendas. "Nunca he pasado tanto calor en mi vida y llevo 75 años aquí", señala una de las vecinas, que no se atreve a asegurar que se deba al cambio climático. "Por lo que sea, por el cambio climático o porque es una casualidad, esto es insoportable", afirma.

Situado en una llanura en el margen izquierdo del río Tajo, Malpica del Tajo, con 1.892 habitantes, ha registrado temperaturas superiores a los 43 grados con la ola de calor africano, que ha coincidido con la festividad de la Virgen de las Nieves en el pueblo. El municipio se encuentra a 51 kilómetros de Toledo y sus habitantes parecen vislumbrar hoy una señal para la esperanza con los 38 grados que soportan, la primera marca inferior a la barrera psicológica de los 40 grados después de cinco días de infierno.

No existen soluciones infalibles para sobrevivir a las altas temperaturas en Malpica de Tajo, pero algunos trucos logran disminuir sus efectos dentro y fuera de las viviendas. Los habitantes del municipio los conocen bien, mucho líquido y no salir de casa hasta la noche. Olvido cuida de su marido enfermo y es consciente de los peligros del verano para él. "Durante el día le suministro mucho agua y zumos, e incluso le echo agua por encima y cuando llega la noche le tengo andando fuera de casa hasta la madrugada", explica. El alcalde, José Gómez, asegura que gracias a estos hábitos ningún vecino ha sido ingresado con síntomas de deshidratación en el hospital de Talavera de la Reina, el municipio más cercano con buenas dotaciones médicas.

No todos cumplen, sin embargo, los consejos del Ministerio de Sanidad. José Antonio Mocha los ignora y acude muchos días después de comer a regar su huerta. "Estoy acostumbrado, a veces incluso voy sin agua". José Antonio reconoce que el calor que ha vivido en su municipio estos días no es normal, aunque recuerda algo parecido hace tres años.

El pueblo sólo parece tener vida por la noche. Después de la cena, los vecinos salen de sus refugios y se reúnen en el camino de la Ermita. La zona de regadío que la rodea hace que en los bancos de hierro forjado del paseo los habitantes de Malpica de Tajo soporten temperaturas de hasta cinco grados menos que en el resto del pueblo. "Regamos por la noche para evitar que el agua se evapore y se pueda aprovechar, pero también para que las temperaturas desciendan", señala el alcalde que explica que este método consigue crear un microclima dentro del municipio. "El mejor momento del día es cuando me voy a pasear con mi mujer por la Ermita. Se ha convertido en una tradición en el pueblo", admite José Antonio, que afirma de forma rotunda que el centro de su municipio es una "olla exprés".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_