Localizadas en Granada tres de las niñas fugadas de un centro de menores cordobés

Las buscaban en Córdoba, pero estaban en Granada. Y en casa de una de ellas. Las han localizado efectivos de la Unidad de la Policía Nacional adscrita a la Junta de Andalucía pero sólo a tres de las cinco niñas fugadas del centro para menores con Trastorno de conducta Prado de Santa María de Hornachuelos (Córdoba). Así, dos de ellas siguen en paradero desconocido. Las cinco se marcharon el pasado mingo, el director del centro denunció esa noche su desaparición ante el cuartelillo de la Guardia civil de Palma del Río. Allí mismo acudieron a la mañana siguiente las chicas para denunciar unos supuestos malos tratos. Inexplicablemente, los agentes las dejaron marchar tras poner la denuncia. Y hasta hoy.

Fuentes de la Junta de Andalucía han informado de que las tres menores han sido halladas en la zona norte de la ciudad de la Alhambra, en el domicilio de un familiar de una de ellas. Las chicas, con edades entre los 14 y 15 años, serán entregadas a los responsables de la Consejería de Igualdad y Bienestar Social, mientras se siguen haciendo gestiones para localizar a las otras dos menores fugadas, según indica la Junta en un comunicado.

Las cinco niñas -Estefanía, Mónica, Piedad, Noelia y María Ángeles- se fugaron el pasado domingo 2 de julio del centro de menores, regentado por la fundación Arco Iris. Se trata de menores que están tuteladas por la Junta de Andalucía, ya sea porque se ha retirado la custodia a sus padres o porque no tienen progenitores. La dirección del centro denunció los hechos ese día por la noche en el Cuartel de la Guardia Civil de Palma del Río.

¿Resultados de la investigación?

Fuentes de la investigación explicaron que el lunes por la mañana las menores se personaron en las mismas dependencias del instituto armado para denunciar los supuestos malos tratos y, una vez interpuesta la denuncia, se marcharon. Las menores acusaron a sus educadores de haberles causado unas supuestas lesiones. La Dirección General de Infancia y Familias de la Junta de Andalucía abrió una investigación sobre los presuntos malos tratos, de la que nada se sabe todavía.

La consejera para la Igualdad y el Bienestar Social, Micaela Navarro, defendió la actuación de la Guardia Civil. En su opinión, actuó de forma "correcta" cuando dejó marchar a las menores porque el centro es de régimen abierto y que las menores no habían cometido delito alguno. Según indicó ayer la consejera de Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, fugas de este tipo en centros de régimen abierto, con livianas medidas de seguridad, suelen darse habitualmente, aunque los chicos suelen aparecer a las pocas horas y vuelven al centro.

Por su parte, el director del centro, Alfonso Fernández, presente en el cuartel durante la declaración de las menores, sostuvo que "las niñas no querían volver y no hay forma de obligarlas". "Hay que convencerlas", añadió. Y parece que no se consiguió, porque las menores salieron tranquilamente.