Los Mossos d'Esquadra detectan en Cataluña 81 grupos de vigilancia ilegal en obras
Ofrecían sus servicios a empresas constructoras a cambio de importantes sumas de dinero y, si no eran contratados, dañaban las edificaciones
Los Mossos d'Esquadra han detectado en Cataluña la presencia de al menos 81 grupos de vigilancia ilegales que actúan como empresas intrusas para prestar un servicio de seguridad en obras con personal no habilitado. Así lo ha anunciado el consejero de Interior, Joan Saura, en respuesta a una pregunta parlamentaria formulada por el grupo de CiU en relación con las obras públicas y privadas que son controladas por grupos de vigilancia ilegales.
Según el consejero, durante el año pasado los Mossos realizaron 134 inspecciones de servicios llevados a cabo por estas empresas intrusas, en su mayoría en obras, que culminaron en 50 actas por infracciones administrativas en relación a los servicios de seguridad en el sector de la construcción.
Extorsiones
Paralelamente, la Unidad Central de Seguridad Privada de los Mossos d'Esquadra y la comisaría general de Investigación Criminal de la policía catalana investigan la posible comisión de hechos delictivos por parte de este tipo de empresas intrusas. Como fruto de esta tarea de investigación, por ejemplo, los Mossos d'Esquadra detuvieron en mayo del pasado año a tres personas que ofrecían servicios de seguridad ilegales a empresas constructoras a cambio de importantes sumas de dinero y, si no eran contratados, robaban y dañaban sus obras.
La operación se cerró el 31 de mayo del pasado año, tras meses de investigación, cuando se detuvo a tres acusados de extorsionar a varios constructores de Sant Cugat del Vallès(Barcelona) desde diciembre de 2006. Los detenidos ofrecían el servicio de vigilancia y control de obras amenazando con que si no lo aceptaban, las obras sufrirían robos. Cuando la oferta era aceptada por los constructores, a cambio de 2.000 y 3.000 euros al mes, los detenidos colgaban un cartel con el nombre de Los Manolos y el símbolo de una rueda de carro y unas franjas de colores verde y azul, sin practicar ninguna vigilancia efectiva de los materiales de obra. Si no contrataban el servicio, las obras eran objeto de robos y daños, según los Mossos.
Un millón de euros en viajes institucionales
El Gobierno catalán ha gastado desde el inicio de esta legislatura un total de 1.002.492,25 euros en
viajes institucionales de sus consejeros y altos cargos al extranjero. Así lo ha admitido el consejero de Relaciones Institucionales, Joan Saura, en respuesta a una pregunta del PPC que hoy ha dado a conocer su portavoz parlamentaria, Carina Mejías. Los viajes institucionales incluyen destinos como el Congo, Marruecos, Marsella (Francia), Senegal, Guatemala, Bruselas (Bélgica), China, Amsterdam (Holanda), Budapest (Hungría), El Cairo (Egipto), Nueva York (EEUU), L'Alguer (Italia), Rumanía, Berlín o Melbourne (Australia), entre otros. Esta cantidad no incluye los 214.162 euros que costó la asistencia
de la delegación catalana a la Feria del Libro de Fráncfort, de la cual formaban parte miembros del Gobierno catalán, personalidades de la cultura y medios de comunicación. Asimismo, el PPC ha denunciado hoy que la delegación de la Generalitat en Londres ha supuesto de momento una inversión de 58.405,40 euros para su puesta en marcha. Según admite la secretaria de Exteriores del Gobierno catalán, Roser Clavell, en respuesta a una pregunta parlamentaria, el alquiler del local en el que se ubicará la oficina supondrá un gasto de 1.261,64 euros cada mes, y el coste previsto de mantenimiento
de la nueva delegación será de 22.884,66 euros anuales, de acuerdo con sus estimaciones. Respecto a la delegación de la Generalitat en Berlín (Alemania), Clavell precisa que el alquiler anual supondrá 13.289,51 euros, a los que hay que sumar los 72.350,75 euros gastados en acondicionar el local y unos 5.720,67 euros anuales en concepto de gastos de funcionamiento. La portavoz del PPC en el Parlamento catalán ha aprovechado todos estos datos para denunciar que el Ejecutivo autonómico "despilfarra" los recursos públicos en un momento de crisis económica. Mejías ha emplazado al Gobierno catalán a "congelar" los sueldos de los altos cargos y a evitar la creación de más cargos de confianza, así como a prescindir de las delegaciones de la Generalitat en el extranjero, cuyo número el Ejecutivo tiene previsto ampliar.
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