El Supremo asegura que Atutxa no disolvió Sozialista Abertzaleak "de forma consciente"

El Pleno de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo (TS) ha hecho hoy público, casi tres meses después de conocerse el fallo, la sentencia que condena al ex presidente del Parlamento vasco Juan María Atutxa, al ex miembro de la Mesa de esta Cámara Gorka Knorr y a la parlamentaria vasca Kontxi Bilbao, de Ezker Batua por la comisión de un delito de desobediencia a la autoridad judicial al no disolver el grupo Sozialista Abertzaleak (SA) tras la ilegalización de Batasuna en 2003. En el fallo, el TS afirma que Atutxa, Knorr, Bilbao "descartaron de forma consciente y deliberada" disolver a SA.

La sentencia condena a Atutxa a una pena de inhabilitación especial para ocupar cargo público de un año y seis meses y le impone una multa de 18.000 euros. Kontxi Bilbao y Gorka Knorr -quien ya no está en política- han sido condenados a un año de inhabilitación para cargo público y deberán abonar 12.000 euros de multa. Dado que Atutxa y Knorr ya no ocupan cargo público, la más afectada es Bilbao, aunque la sentencia admite recurso. La resolución estima así el recurso de casación interpuesto por el sindicato Manos Limpias contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) que absolvió a los tres parlamentarios.

Tras hacerse público el contenido de la sentencia, Kontxi Bilbao ha afirmado que es "absolutamente seguro" que ella, el ex presidente del Parlamento vasco y Gorka Knorr recurrirán ante el Tribunal Constitucional la condena. Bilbao ha declarado que por "seguridad jurídica" pedirán también que se paralice la ejecución de la sentencia hasta que el Constitucional se pronuncie. Incluso ve "factible" acudir en amparo ante el Tribunal de Estrasburgo.

"Siempre hemos dicho que agotaríamos todas las vías legales", ha indicado Bilbao, quien ha explicado que tanto ella como Atutxa y Knorr han "compartido la misma visión y estrategia de no renunciar a nada" de aquello a lo que se puedan acoger.

Bilbao ha criticado que el 21 de enero se conociera el fallo y que los magistrados "hayan tardado tres meses en elaborar de alguna forma la justificación para aquel fallo". Asimismo, ha censurado que se haya conocido la notificación de la sentencia "a través de los medios".

La resolución tiene el voto particular de los magistrados de la Sala de lo Penal del alto tribunal Julián Sánchez Melgar, Luciano Varela, Carlos Granados, Joaquín Giménez, Andrés Martínez Arrieta. La decisión de la Sala supone el rechazo de las pretensiones expuestas tanto por el fiscal Fernando Prieto como por el abogado de Atutxa, Bilbao y Knorr, quienes habían solicitado que se aplicara la denominada doctrina Botín, que impide la apertura de un juicio a instancia exclusiva de la acción popular, como ocurría en este caso.

Casi tres meses después

Manos Limpias, que ejercía la acusación popular, fue la única parte que presentó cargos en el juicio celebrado en su día contra los ex parlamentarios, ya que el fiscal en el tribunal vasco desistió de acusar y no existía ninguna acción particular, dada la naturaleza del delito.

La Audiencia argumentó, y posteriormente lo confirmó esta misma Sala del tribunal Supremo, que la celebración de un juicio únicamente instado por la acusación popular contraviene la legalidad procesal. De haberse producido una decisión contraria se habría tratado de la primera vez que se aplica esta doctrina a un caso distinto al de Botín. En las mismas circunstancias se encuentran hoy otros casos, como el que se tramita contra el lehendakari, Juan José Ibarretxe, por reunirse con miembros de la ilegalizada Batasuna, y el denominado caso del ácido bórico, contra policías por falsear informes sobre los atentados del 11-M.

El retraso de la sentencia de Atutxa ha obligado a la Audiencia Provincial de Madrid a aplazar hasta en dos ocasiones el inicio del juicio por este último caso, con el fin de conocer los argumentos del alto tribunal respecto de la doctrina Botín y su posible aplicación a este caso.