"Todo lo que cambia en los tratados, cambia para mejor"

"Lo hemos conseguido". Con estas palabras y una satisfacción matizada por la fatiga tras una larga noche de negociación, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha comparecido ante los medios de comunicación desde Bruselas para valorar el acuerdo sobre la reforma del Tratado Constitucional de la Unión Europea.

Zapatero ha destacado que se han superado los principales escollos y que se ha acordado "lo fundamental": Por un lado, que para la adopción de decisiones en el seno de la Unión ya no será necesaria, casi nunca, la unanimidad; por otro lado, que Europa tendrá una sola voz, fortalecida, en la escena mundial, en referencia a los nuevos cargos que se crearán, el de presidente de la UE y el de ministro de Asuntos Exteriores de la Unión.

Trámite parlamentario

La legitimidad del nuevo texto, según Zapatero, proviene del Derecho comunitario. El presidente ha rechazado la necesidad de convocar un nuevo referéndum en España para ratificar los cambios realizados sobre el texto constitucional previo que ya se aprobó por esta vía. El Parlamento será el encargado de ratificar la norma final. "Una gran parte del contenido de la Constitución europea está recogido en los nuevos tratados", ha dicho Zapatero.

El presidente ha señalado, además, que a petición de España el nuevo texto incluirá una referencia a la necesidad de fomentar la interconexión energética entre los países miembros de la UE.

Luces y sombras

Los nuevos tratados recogerán una carta europea de derechos, pero dicho texto no será de aplicación en Reino Unido, algo que Zapatero ha lamentado. El presidente ha reconocido que podía haber habido más cambios deseables, pero ha asegurado que se queda con un sabor de boca "muy positivo". "Todo el mundo ha cedido un poco para que todos ganemos mucho", ha añadido.

El presidente, a pesar de los obstáculos presentados por Reino Unido, ha tenido palabras de agradecimiento para el primer ministro británico, Tony Blair, quien acudía a su último Consejo Europeo antes de dejar el cargo.

Además, de con Blair, Zapatero ha destacado el trabajo intenso realizado en las últimas horas con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y con el primer ministro italiano, Romano Prodi. Respecto a Sarkozy, Zapatero ha recordado que las diferencias ideológicas que le separan del mandatario galo no han sido un obstáculo para presentar un frente común en la cumbre. "Esto es Europa", ha dicho un satisfecho Zapatero.