_
_
_
_

La Policía arresta a un ginecólogo por agresión sexual en una consulta de Móstoles

Seis mujeres denuncian haber sufrido tocamientos el mismo día por parte del médico y exigen "que pague por lo que ha hecho"

La Policía ha detenido a un ginecólogo peruano por delitos de agresión sexual a varias mujeres en un centro sanitario del municipio madrileño de Móstoles, donde el facultativo acudió a realizar una sustitución de un compañero. El médico, que se encuentra en prisión por orden del juez de guardia, llegó a hacer tocamientos hasta a seis mujeres en un sólo día. Las víctimas exigen "que pague por lo que ha hecho".

Más información
"En mi país se examina a flor de piel"

La Jefatura Superior de Policía de Madrid ha informado hoy de que el detenido, el peruano Giovanni Elmer Onofre P.M, de 41 años, no estaba colegiado en Madrid sino en León. Fue arrestado el pasado 4 de junio, tras agredir a seis mujeres en un sólo día. Según la misma fuente, la policía inició su investigación cuando una mujer, de 29 años, denunció que había acudido a un centro sanitario de la citada localidad para ser tratada de una dolencia que en nada tenía que ver con los tocamientos a los que fue sometida por el ahora arrestado. También relató que cuando estaba en la sala de espera le sorprendió ver a una mujer, que le precedió en la consulta, salir llorando.

La policía logro localizar a seis varias mujeres que habían pasado ese día por la consulta del facultativo y todas manifestaron haber sufrido tocamientos. En sus declaraciones relataron como el médico les había hecho desnudarse mientras les tocaba los senos y como en algunos casos les introdujo los dedos en la vagina sin guantes. Tras los hechos, el doctor fue localizado y detenido en la estación de Renfe de la localidad. Una vez puesto a disposición judicial, el titular del juzgado de guardia ha decretado su ingreso en prisión.

Trató de desnudarla por un dolor de garganta

Dos de las víctimas han señalado que están viviendo "un mal momento" porque la situación que han vivido ha sido "difícil de superar", pero han subrayado que lucharán hasta conseguir que se celebre un juicio que condene al presunto agresor para que "pague por lo que ha hecho". Una de las agredidas ha contado que el día 4 de junio acudió a urgencias de uno de los centros médicos de Móstoles porque tenía una infección de orina "con tan mala suerte" que el médico que le atendió fue el detenido Giovanni Elmer Onofre. "Al llegar a la consulta, el doctor me pidió que me desnudara de cintura para arriba porque me dijo que tenía que auscultarme. A mí me extrañó, ya que ni siquiera me habían hecho análisis, pero aún así le obedecí", ha indicado la joven, que ha relatado que tras desvestirse, el médico empezó a tocarla el pecho y le exigió que se quitara el resto de la ropa.

Al sentirse víctima de una agresión sexual, la mujer acudió a la comisaría de Policía de la localidad con la intención de denunciar los hechos. "Sólo espero que esto se pase rápido y que a ese hombre

le juzguen porque desde que pasó todo estoy muy nerviosa y no puedo dormir", ha afirmado la joven, que ha añadido que, junto con el resto de agredidas, se presentará como acusación particular en el caso de que se celebre un proceso penal. Además, la mujer ha acudido a una asociación de mujeres víctimas de agresión sexual, donde ha sido atendida por una trabajadora social. "Es muy desagradable recordar día a día lo sucedido", admite. Otra de las víctimas del médico, que acudió a la consulta por un simple dolor de garganta, ha señalado que el día de los hechos el detenido, después de levantarle la camiseta y auscultarle la espalda, le desabrochó el sujetador y le tocó el pecho.

"Le pregunté si podía abrocharme el sostén, pero entre murmullos me dijo que no", ha explicado. Además, ha afirmado que el doctor, que a su juicio tenía "mala presencia", le tocó la zona de los ovarios e intentó quitarle los pantalones, argumentando en todo momento que el dolor de garganta podía haberle provocado una infección. La joven se resistió en todo momento a los "abusos" del facultativo. "Presté declaración ante la policía porque lo que más rabia me daba es que pudiera hacerle a personas mayores lo mismo que me había hecho a mí", ha sentenciado la joven, quien también se

personará como acusación. "Que pague por lo que ha hecho", ha apostillado.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_