"Si hubiera dependido del PP, Andalucía no hubiera tenido ningún Estatuto"
El PSOE trata de evitar que el principal partido de la oposición rentabilice la alta abstención pese a haber apoyado la reforma estatutaria
Pese a que la reforma del Estatuto andaluz ha gozado del respaldo mayoritario de los ciudadanos (un 87,45% de síes en el referéndum de ayer, frente a un 9,48% de noes), la altísima abstención (63,72%) ha puesto a la defensiva al PSOE (que gobierna esa comunidad) contra los que ahora "están quitándose las pulgas de encima". Todas las formaciones regionales excepto el Partido Andalucista apoyaron el cambio legal. Los socialistas marcan ahora en corto al Partido Popular para que no intente sacar partido ("aprovecharse deslealmente", han dicho) de la escasa participación.
La realidad es que sólo el 36,28% de los ciudadanos con derecho a voto se acercó ayer a las urnas. El presidente de la Junta andaluza, Manuel Chaves, ha asumido esta mañana "la responsabilidad" que le corresponde por ello. Considera "acertada" la decisión de llevar a cabo la reforma ("la volvería a adoptar", ha dicho), y se ha definido como "político responsable" frente a los que adoptan "la postura fácil", presumiblemente los que se quitan las moscas de encima. Por su parte, la presidenta del Parlamento andaluz, la socialista María del Mar Moreno, ha recalcado que "el dato negativo" de la abstención debe llevar a "analizar por qué se produce este distanciamiento entre ciudadanos y política".
El anterior referéndum estatutario, en 1981, contó con la participación del 53,68% de los ciudadanos con derecho a voto. Como referencia, decir que la consulta sobre la Constitución Europea, el año pasado, rondó el 60% de abstención. A la hora de asignar culpas, el consejero de Presidencia de la Junta, Gaspar Zarrías, lo tiene claro: el electorado del Partido Popular es responsable del "70% u 80%" del no, y ha sido en sus feudos donde se han registrado los peores datos de participación. En su opinión, el PP "pedía el sí con la boca chica y planteaba una serie de incógnitas que han hecho que sus electores hayan podido pensar que este no era su Estatuto y que por lo tanto, o bien se han quedado en casa o bien han votado que no".
"Con la boca pequeña"
Esta mañana se ha reunido la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE para analizar la consulta de ayer. En la rueda de prensa posterior al encuentro, el secretario de Organización de este partido, José Blanco, ha acusado al Partido Popular "de aprovecharse deslealmente" de la abstención. "Si hubiera dependido del PP, Andalucía no hubiera tenido ni el Estatuto nuevo de ayer ni ningún Estatuto", ha dicho. El nuevo Estatuto nace, en su opinión, "con una carga extraordinaria de legitimidad", y supone un "acierto" de Chaves, que "ha puesto el autogobierno de Andalucía en forma". Para el PP sólo tiene palabras duras: "incoherencia" y "oportunismo", porque "primero intentó frenarlo todo lo posible, luego pidió el sí con la boca pequeña" y ahora "trata de aprovecharse deslealmente de la abstención".
Desde luego, el Partido Popular no se ha quedado de brazos cruzados. Su secretario general, Ángel Acebes, ha comparecido esta mañana ante los periodistas tras la reunión del Comité Ejecutivo Nacional para asegurar que la abstención "es un fracaso personal" del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Lo sucedido ayer, ha dicho, "viene a confirmar el absoluto fracaso de Zapatero en los dos ejes fundamentales de la legislatura: la reforma de los estatutos de autonomía y la negociación con ETA".
En su opinión, la reforma "no interesa a nadie", y deja patente "la irresponsabilidad con que se afrontó este proceso". "[El Gobierno] ha confundido prioridades" y "se ha ocupado de lo que no importa a nadie: laicismo, Guerra Civil o reforma del modelo territorial", ha añadido Acebes. El líder conservador cree que, si su formación no hubiera participado en la reforma, "estaríamos hablando de la presentación de un recurso ante el Tribunal Constitucional", pues fueron ellos los que permitieron que el texto sea "constitucional y no profundizase en la división entre ciudadanos".
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