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Moratinos anuncia restricciones para búlgaros y rumanos durante dos años tras su ingreso en la UE

Caldera anuncia que la decisión no está tomada mientras el ministro de Asuntos Exteriores la da por hecha

El ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, y su homólogo de Argelia, Mohamed Bedjaoui, al término de la reunión que mantuvieron hoy en Madrid.
El ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, y su homólogo de Argelia, Mohamed Bedjaoui, al término de la reunión que mantuvieron hoy en Madrid.EFE

El ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, ha anunciado hoy que España restringirá la libre circulación de ciudadanos búlgaros y rumanos durante dos años tras la integración de estos dos países en la Unión Europea, prevista para el 1 de enero de 2007. Casi al mismo tiempo, el responsable de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, señalaba que no había ninguna decisión aún tomada al respecto, y abogaba por ser flexibles.

Rumania y Bulgaria se integrarán en la UE el próximo 1 de enero. A partir de entonces, sus ciudadanos deberían por derecho propio gozar del mismo derecho de libre circulación por el territorio comunitario que un francés o un italiano. Sin embargo, el tratado de adhesión permite establecer medidas restrictivas durante siete años.

Reino Unido anunció el pasado 24 de octubre que, al contrario de lo que hizo hace dos años con la entrada de los últimos diez países en la UE, impondría restricciones a la libre circulación de búlgaros y rumanos. Desde la última ampliación han llegado 600.000 trabajadores a Reino Unido, 20 veces más de lo previsto por el Gobierno. La economía británica absorbió con solvencia la avalancha, pero no así los servicios sociales —en especial sanidad y educación—. Así las cosas, Reino Unido permitirá la libre entrada de búlgaros y rumanos, pero sólo les dejará incorporarse al mercado de trabajo bajo condiciones especiales. Con estas medidas espera que no se establezcan en su territorio más de 30.000 ciudadanos de esos países. Irlanda también impondrá restricciones.

En España, los dos grandes sindicatos, Comisiones Obreras y UGT, pidieron al Gobierno que impusiera una moratoria de dos años para que no pudieran conseguir permiso de trabajo a partir del 1 de enero. En España viven en la actualidad 189.000 rumanos con tarjeta de residencia (no la precisarán a partir de enero), aunque hay 193.000 empadronados. En cuanto a los búlgaros, hay 55.000 en situación legal.

España ya aplicó esta moratoria de dos años en la anterior ampliación. "Luego, de manera natural y normal, levantamos la restricción a la libre circulación de personas, a los dos años, y fue celebrado tanto en Polonia, como en Hungría y en otros países de Europa del Este y Central", ha explicado hoy Moratinos.

Caldera, que esta mañana ha participado en un foro especializado, ha explicado sin embargo que el Gobierno no ha tomado "ninguna decisión" al respecto, y ha abogado por adoptar medidas "flexibles". "Hay que hacer algo flexible, ya que hay que proteger nuestro mercado laboral pero estableciendo los mecanismos de flexibilidad necesarios para cuando se necesite mano de obra", ha explicado. "Todavía el Gobierno no tiene cerrada una decisión", ha concluido. Al parecer, Moratinos no comparte ese punto de vista.

Hasta el momento, Finlancia, Estonia, Eslovaquia, Chipre y Polonia han decidido no aplicar restricciones. Austria, Alemania, Bélgica, Francia, Alemania y Luxemburgo si lo harán. Italia, Grecia, Holanda, Hungría, Portugal, Irlanda y Reino Unido, también pero con matices.

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