El Gobierno invita al PP a suscribir un "gran pacto nacional por la inmigración"

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha invitado hoy al Partido Popular a suscribir "un gran pacto nacional por la inmigración" después de que ayer el líder de esa formación, Mariano Rajoy, propusiera cambiar la legislación para prohibir las regularizaciones masivas. De la Vega ha calificado además la política de inmigración del Gobierno de "responsable, sensata y firme".

En su discurso ante el plenario del grupo socialista reunido en el Congreso, De la Vega ha emplazado a los diputados, senadores y eurodiputados socialistas a "defender" públicamente y "con orgullo" el valor del proceso de regularización de inmigrantes que emprendió el Gobierno y que ha calificado de "ejemplar". Para la vicepresidenta, el "reto" de la inmigración es un fenómeno de gran "complejidad" que constituye "una prueba del éxito social y económico de la democracia española en los últimos treinta años", y el cual exige soluciones "imaginativas".

El portavoz parlamentario del PP, Eduardo Zaplana, ha lanzado desde los pasillos del Congreso la primera respuesta, informal, eso sí, de su partido a la propuesta del PSOE. En su opinión, "llega un poco tarde". "Con independencia de que se pueda hablar o no, si la propuesta se hubiera hecho hace dos años, nos habríamos evitado las tragedias que hemos vivido y tendríamos un mayor respeto de los países de la Unión Europea". Según Zaplana, para que su partido se siente a la mesa, el Gobierno deberá "asumir" antes "el error que ha cometido" en materia de inmigración. Si no, "es muy difícil que pueda haber acuerdo".

"Responsable, sensata y firme"

Horas antes, la vicepresidenta primera del Gobierno apostaba por seguir reforzando las fronteras y, a medio y largo plazo, avanzar en políticas dentro del marco europeo, de manera que la UE asuma su responsabilidad. De la Vega ha destacado que España ha conseguido situar el fenómeno migratorio en la "agenda política" europea y "movilizar los recursos de una UE que comparte el diagnóstico" sobre el problema, del que recordó que hace un año apenas se hablaba en este ámbito.

De la Vega ha explicado que la política del Ejecutivo es "responsable, sensata y firme" y ha apuntado que el proceso de regularización ha permitido que casi 600.000 inmigrantes tengan contrato de trabajo, todo ello con el acuerdo de empresarios y agentes sociales, algo que -según ha explicado- no consiguió el PP en sus cinco regularizaciones.

Cambio de rumbo

La oleada de cayucos que han llegado a Canarias en el último mes y medio -con más de 5.000 inmigrantes irregulares- ha provocado un cambio de rumbo en la política de inmigración del Gobierno. Ayer PP y PSOE coincidieron en rechazar nuevas regularizaciones extraordinarias, aunque los populares fueron más allá y sugirieron prohibirlas por ley.

El PSOE, por su parte, asegura que no piensa modificar la Ley de Extranjería que aprobó el Gobierno popular en 2003. En los últimos ocho años ha habido ocho regularizaciones extraordinarias con las que 1,2 millones de inmigrantes han conseguido papeles. De ellos 720.000 fueron regularizados por el Gobierno socialista.