El PP exige el cese del delegado del Gobierno en Madrid por las detenciones tras la agresión a Bono

El Partido Popular de Madrid ha exigido hoy el cese del delegado del Gobierno en la comunidad, el socialista Constantino Menéndez, tras hacerse públicas las declaraciones del jefe policial que investigó las presuntas agresiones que sufrió el ministro de Defensa, José Bono, en la marcha convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) el pasado 22 de enero en Madrid.

El inspector jefe de la brigada provincial de información afirmó el pasado viernes ante el juez que fue obligado a detener a dos miembros del PP de Las Rozas, Isidoro Barrios y Antonia de la Cruz, supuestamente implicados en los incidentes, pese a que dijo "no tener pruebas en su contra", según publica hoy el diario ABC. Su superior le advirtió de que sino se producían los arrestos iban "a tener problemas". Tras discrepar de esta medida se le comunicó que estaba cesado como instructor de las diligencias del caso, y añadió que parte del expediente que fue remitido por la Policía a Justicia fue rehecho después de su destitución.

Ampliación de la querella

Ante estas nuevas revelaciones, el PP ha pedido explicaciones al ministro del Interior, José Antonio Alonso, acerca de cómo se produjeron estas detenciones y ha decidido ampliar la querella interpuesta por la detención de sus dos militantes para incluir también los presuntos delitos de destrucción y falsificación de pruebas, prevaricación y falso testimonio. Estas medidas han sido anunciadas por el secretario general del Partido Popular de Madrid, Francisco Granados, en rueda de prensa ofrecida junto con el secretario de Comunicación de dicha formación política, Juan José Güemes.

La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha denunciado por su parte la utilización partidista" de las fuerzas de Seguridad, propia "de Estados totalitarios", y que se cambiaran las declaraciones de los escoltas de Bono y de los de la eurodiputada socialista Rosa Díez, en las que afirmaban que no hubo agresión física o lesiones por parte de los dos militantes, según ha explicado. También ha entrado en la polémica el secretario general del PP, Ángel Acebes, que ha anunciado que su partido solicitará la "inmediata dimisión" del ministro del Interior "si no da una explicación suficientemente satisfactoria" a las detenciones.

Mentiras

El delegado del Gobierno en Madrid ha asegurado en un comunicado no haber ordenado las detenciones de los dos militantes populares y ha afirmado que ni interfirió en la actuación policial llevada a cabo ese día ni recibió instrucciones de nadie. Su compartamiento se guió por un "escrupuloso respeto a la legalidad vigente". "Quienes afirmen o insinúen lo contrario simplemente miente, faltan conscientemente a la verdad persiguiendo objetivos que nada tienen que ver con la justicia", ha advertido.

En defensa, aunque no explícita, del delegado del Gobierno y de la actuación policial llevada a cabo tras los incidentes, ha salido el secretario general del PSM-PSOE, Rafael Simancas, quien ha pedido al PP que no intente "rentabilizar políticamente" lo ocurrido en la manifestación antiterrorista. Ha dicho que le "entristece que aquellos que consiguieron manipular la intención primera de esa manifestación sigan ahora intentando obtener rentabilidad política en un asunto que debería de unirnos a todos".