La policía detiene en Vizcaya a dos presuntos miembros del aparato financiero de ETA

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido hoy en la localidad de Ugao-Miraballes (Vizcaya) a Andrés Larrea Aranzábal y Pedro Félix Morales San Sebastián, acusados de formar parte del aparato financiero de ETA. Los arrestados financiaban a los huidos de la organización terrorista en Venezuela y Cabo Verde. En este último país, la banda mantiene una red de comunicaciones que conecta a estos huidos con la dirección terrorista, ha informado el Ministerio del Interior.

Los arrestos son obra de agentes de la Comisaría General de Información, en colaboración con la Brigada Provincial de Información de Vizcaya. Se han producido en la localidad vizcaína de Ugao-Miraballes y han ido acompañados del registro de los domicilios de los detenidos, donde la policía se ha incautado de documentación en papel y soportes informáticos que están siendo analizados.

La operación, según Interior, se enmarca dentro de las investigaciones que la Comisaría General de Información está desarrollando, siguiendo las directrices de la Audiencia Nacional, en torno a los procedimientos financieros articulados por la dirección de ETA para el sostenimiento económico de los militantes huidos, con causas judiciales pendientes y asentados en diferentes países. En esta ocasión los fondos se dirigían a Cabo Verde y Venezuela.

Según las investigaciones, los dos detenidos habrían ordenado diversas operaciones de transferencia al extranjero entre 1998 y 2004. Estos traspasos partían de una cuenta corriente en la que tanto Larrea, de 56 años, y Morales, de 58, figuraban como titulares. La cuenta tenía 36.000 euros y estaba destinada a etarras con causas pendientes en España por "delitos muy graves" relacionados con la actividad terrorista de ETA.

Red de comunicaciones en Cabo Verde

Esta cuenta bancaria estaba vinculada a la estructura local de Herri Batasuna/Batasuna de Ugao Miraballes y a la herriko taberna de dicha localidad. El destino del dinero era la financiación de la logística de la red de comunicaciones instalada en Cabo Verde, garantizando los contactos entre los militantes huidos y la dirección de ETA. También suministraba fondos a los etarras refugiados en el extranjero para su sustento y, al tiempo, para permitir que estuvieran a disposición, en cualquier momento, de la dirección por si tenían que incorporarse a ella o a los comandos.

Según ha declarado en el Congreso el ministro del Interior, José Antonio Alonso, antes de asistir al debate del estado de la nación, estas detenciones, "como todas las de supuestos miembros, son importantes y se suman a las producidas en las últimas semanas relacionadas con el aparato internacional, militar, logístico, y ahora al financiero". Alonso ha añadido que ya son más de 160 las personas presuntamente relacionadas con ETA que han sido arrestadas en lo que va de año.

El pasado lunes, la Guardia Civil detuvo a cuatro personas, dos en Arrigorriaga, una en Amorebieta y otra en Bilbao, todas acusadas de formar parte de la red de recogida de información para la organización terrorista.