Rajoy bloquea el Pacto Antiterrorista hasta que Zapatero promueva la ilegalización de EHAK
El líder del PP exige por carta al presidente que acuda a los tribunales para evitar que "los representantes de los terroristas" entren en el Parlamento vasco
El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha lanzado hoy un ultimátum al presidente del Gobierno: no acudirá a ninguna reunión del Pacto Antiterrorista hasta que Zapatero plantee ante los tribunales la ilegalización de EHAK, la formación para la que Batasuna pidió el voto y que se ha alzado con nueve escaños en las últimas elecciones vascas.
"Iré a una reunión del pacto para que me diga (Zapatero) que va a recurrir. Ese es el pacto al que quiero ir. Otro no me interesa", ha sentenciado el presidente del PP en una rueda de prensa en la sede de su partido en Madrid. "Que interpongan recurso y luego ya veremos", ha puntualizado Rajoy, quien ha defendido esta postura de bloqueo para evitar que los diputados electos del Partido Comunista de las Tierras Vascas (EHAK en sus siglas en euskera) tomen posesión de sus escaños y se genere una situación como la vivida la pasada legislatura con Batasuna.
En una carta dirigida al jefe del Ejecutivo, el líder del PP le ha exigido que acuda a los tribunales para impedir que "los representantes de los terroristas" entren en el Parlamento vasco y ha dicho que la única reunión del Pacto Antiterrorista que le interesa es una en la que se anuncie la medida. Luego, en rueda de prensa, Rajoy ha recordado que el Gobierno se ha negado hasta en seis ocasiones a reunir el pacto cuando el PP se lo ha solicitado y ha dicho que "ahora no se trata de reunirse, sino de tomar una decisión".
"Imposición" del PP
El portavoz del PSOE en el Congreso, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha contestado al plantón de Rajoy calificando su actitud de "imposición" para que el Gobierno haga "lo que él pide", algo que según Rubalcaba es la negación de "la esencia misma" de ese pacto. En una rueda de prensa en el Congreso, el portavoz socialista ha recordado a Rajoy que uno de los fundamentos del pacto es la renuncia por parte de los dos partidos a utilizar el terrorismo en la confrontación política. En ese sentido, ha calificado de "insólito" que, sólo un año después de salir del Gobierno, el PP vuelva a tener la actitud que siempre ha tenido cuando ha estado en la oposición, intentar "utilizar la política antiterrorista contra el Gobierno". El Pacto Antiterrorista es para Rajoy, según Rubalcaba, "un corsé que no quiere admitir", ya que le impide utilizar el terrorismo como "un arma de desgaste contra el Gobierno".
En cuanto a la petición concreta de que el Gobierno promueva la ilegalización de EHAK, Rubalcaba ha recordado al PP que el Estado de Derecho y los tribunales "funcionan con pruebas y no con sospechas, ni con convicciones". En todo caso, ha asegurado que el PSOE seguirá defendiendo el Pacto Antiterrorista, porque es "la vía más rápida para acabar con ETA".
Pruebas insuficientes
La postura del PP contrasta con las pruebas, insuficientes, que hasta el momento ha acumulado la Guardia Civil sobre la presunta relación de EHAK con la ilegalizada Batasuna. La Fiscalía General del Estado y la Abogacía del Estado consideran, en base a estos informes, que no hay pruebas con entidad jurídica suficiente como para plantear con éxito la ilegalización de EHAK. Ese criterio fue respaldado ayer de nuevo por el presidente del Gobierno cuando dijo que "en democracia no hay razones de Estado, sino de derecho". En cambio, desde el PP se acusa al Gobierno y a su presidente de "ocultar pruebas" de esa relación y "escudarse" en los informes contarios a la ilegalización de EHAK redactados por la Abogacía del Estado. La última sesión de control al Gobierno, el pasado miércoles, sirvió para escenificar la ruptura de PSOE y PP en materia antiterrorista. Rajoy criticó la política de lucha contra ETA que lleva a cabo el Gobierno por primera vez desde que ambos partidos suscribieran el pacto, e insinuó que el Ejecutivo había abierto conversaciones con EHAK, algo que Zapatero rechazó rotundamente.
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