Caos circulatorio en Madrid tras la nevada más importante de los últimos 50 años
Autobuses y trenes de cercanías han registrado importantes retrasos durante la mañana.-AENA suspende 90 vuelos en el aeropuerto de Barajas
Madrid ha amanecido cubierta por un manto de nieve que ha superado a primera hora los diez centímetros de espesor en ciertas zonas de la ciudad. La nevada, la más importante de los últimos 50 años, ha remitido a última hora de la tarde pero durante el día ha agravado los ya de por sí habituales problemas circulatorios en los accesos y en el interior de la capital. Por ello, las autoridades han recomendado que se haga uso del transporte público.
El tráfico aéreo también se ha visto afectado por el temporal. Así, hasta las 17.30 horas un total de 90 vuelos han tenido que ser cancelados en el aeropuerto de Barajas, que también ha registrado importantes retrasos, de unas dos horas de premodio, según informa AENA. Hacia las 15.00 horas se han levantado las regulaciones en los aterrizajes establecidas por las tormentas de nieve.
Problemas en los accesos
La nieve ha sorprendido a miles de madrileños en el momento de salir de casa para acudir al trabajo. Por este motivo, la hora punta de entrada a la ciudad se ha hecho más larga y tediosa de lo habitual. Los principales problemas se han registrado en los accesos a Madrid, haciendo muy densa la circulación en la M-30 y la M-40. En esta última las retenciones se han cebado con el tramo comprendido en la intersección de la por la M-40, la A-1 y la R-2, en la zona de la Cuesta de los Dominicos y La Moraleja. En el interior de la ciudad los atascos se han sucedido durante toda la mañana. La nieve en la calzada ha provocado un total de 104 accidentes en la capital, ninguno de ellos de gravedad.
Varias líneas de autobuses -con origen en pueblos de la zona norte- han sufrido retrasos debido a la lentitud con que tenían que circular los vehículos públicos. Las líneas del Metro han registrado una gran afluencia de personas que han preferido utilizar el transporte subterráneo, lo que también ha originado aglomeraciones de personas en algunos momentos, en especial en la estación de Cercanías de Atocha.
A primera hora, los cercanías también han registrado retrasos superiores a treinta minutos a causa de la acumulación de nieve en las vías, lo que también ha causado problemas en el cambio de agujas en las líneas C-7, C-8 y C-10, mientras que la línea C-9 que circula desde Cercedilla hasta Cotos se encuentra cerrada. En lo que respecta a los trenes de grandes líneas que salen de la estación de Atocha, así como del AVE, a primeras horas de la mañana se han producido algunos retrasos algo superiores a cinco minutos, también a causa del cambio de agujas.
La Dirección General de Protección Ciudadana de la Comunidad de Madrid ha activado a las seis de la pasada madrugada el nivel 1 de emergencias del plan de inclemencias invernales. Este organismo recomienda a los conductores que lleven cadenas en sus vehículos por si las pudieran necesitar, que circulen con el depósito lleno de combustible y que viajen con el teléfono móvil cargado. Ante esta situación, han salido a la calle y las carreteras de la comunidad todas las quitanieves de que dispone el Gobierno regional, 20 de titularidad autonómica y otras tantas estatales, y se han esparcido 1.800 toneladas de sal para aminorar los efectos de la nieve en la conducción.
A diferencia de otras comunidades del norte penínsular, la nevada no ha impedido que los más de 1.500 centros educativos de la Comunidad de Madrid funcionaran con normalidad. Tan sólo 32 colegios o institutos, todos en la zona norte, han tenido que suspender sus clases debido a la escasa asistencia de alumnos, han explicado fuentes de la Consejería de Educación.
La mayor nevada en 50 años
La nevada que afecta desde la pasada madrugada a Madrid es la mayor registrada en la capital desde los años 1956 y 1957, según ha confirmado el Instituto Nacional de Meteorología. Hay que remontarse casi 50 años para encontrar una paisaje tan blanco en Madrid, donde se han registrado espesores de más de diez centímetros. Más recientes han sido las nevadas ocurridas en los años 1997 y 2001, pero entonces la nieve cubrió la capital con sólo 5 centímetros de espesor.
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