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Una agencia de viajes deja 'tirados' en Cancún a 360 españoles que iban a regresar a Madrid

Los turistas han llegado a las 14.00 horas a Barajas, tras permanecer 24 horas en la ciudad mexicana al cancelar la empresa mayorista su vuelo de regreso

El grupo de 367 turistas españoles que estuvieron 24 horas tirados en Cancún (México) tras cancelar la empresa mayorista su vuelo de regreso ha llegado pasadas las 14.00 horas al aeropuerto de Barajas, donde han mostrado su indignación por el trato recibido durante la espera y por la falta de información proporcionada por la empresa organizadora del viaje, la agencia Pullman Tour.

Este grupo de turistas -162 mujeres y 205 hombres, entre ellos niños y ancianos- debía haber salido ayer por la tarde hacia Madrid, pero el vuelo se canceló sin previo aviso y sólo se les informó de su situación horas después, cuando fueron llevados a varios hoteles del centro de la ciudad. En declaraciones a la prensa a su llegada a Barajas, los afectados han explicado que permanecieron cerca de seis horas esperando en el aeropuerto sin que nadie les informara de lo que ocurría, ya que ningún representante de la mayorista contactó con ellos y el número de teléfono que les habían proporcionado estaba desconectado "salvo una vez que cogieron el teléfono pero donde tras contarles lo sucedido, colgaron directamente".

En este sentido, han asegurado en que les trataron "como borregos", ya que apenas les proporcionaron alimentos en las cerca de siete horas de espera en el aeropuerto, salvo "un bocadillo y una bebida que supuestamente costaba diez dolares y que era por lo menos de la semana anterior". Además, han subrayado que durante ese rato "había niños y mujeres embarazadas que tenían que esperar sentadas en el suelo sobre cartones".

Pensiones que "eran una guarrería"

Asimismo, se han quejado de los hoteles que les proporcionaron para pasar la noche no eran los mismos para todos y que a algunos les tocó dormir en pensiones que "eran una guarrería y donde la gente se tenía que duchar con chanclas o dormir vestido". Así, la comida

proporcionada era asquerosa, tuvieron que "rogar en los hoteles por una botella agua", lo que hizo que algunos de ellos pasaran 24 horas sin apenas ingerir alimento.

Por otro lado, han hecho hincapié en que tuvieron que permanecer 24 horas sin visado por la ciudad "con el riesgo que esto supone", así como que un mujer que se rompió el dedo tuvo que pagar "una barbaridad para poder curárselo". Por último, los viajeros han informado de que han recogido firmas para presentar "una reclamación conjunta contra Pullmantur", además de las que a título individual realice cada uno de los afectados por la cancelación.

Por su parte, Carina Custodio, portavoz de la agencia Pullman, se ha limitado a señalar que los turistas se quedaron varados porque no llegó a tiempo el avión contratado por la agencia subsidiaria Grand Control que tenía que llevarles el lunes a Madrid. Custodio ha añadido que el problema se ha subsanado con su salida de Cancún a medianoche hora local, al tiempo que ha manifestado que los clientes fueron atendidos "en todo momento" por el personal de la compañía, que les alojó en distintos hoteles de la zona, "recibiendo continua información sobre la evolución del retraso".

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