El CGPJ pide explicaciones a Interior por el "fallo policial" en el asesinato de una mujer
Encarnación Rubio, la mujer de 46 años que ayer fue atropellada tres veces por su marido, tenía una orden de protección dictada por un juez
Familiares, amigos y vecinos de Encarnación Rubio, la mujer de 46 años que murió ayer al ser atropellada tres veces por su marido en Granada, han despedido hoy a la primera víctima mortal de la violencia doméstica que tenía una orden de protección dictada por un juez. La presidenta del Observatorio de Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Montserrat Comas, ha anunciado que va a pedir explicaciones al Ministerio del Interior en funciones por este "fallo policial".
La mujer tenía una orden de protección dictada el 27 de enero. En ella, una juez de Granada pedía expresamente a la Guardia Civil que protegiese policialmente a la víctima porque consideraba que su vida corría peligro. Montserrat Comas ha insistido en que "aunque la orden de protección ha fallado en este caso concreto, no se debe cuestionar la eficacia de la ley reguladora de este instrumento porque hay 6.004 órdenes dictadas judicialmente que están funcionando, con esta lamentable excepción".
Montserrat Comas cree que Interior debe revisar sus criterios policiales de control y seguimiento de las órdenes de protección para víctimas de violencia doméstica, además de incrementar el número de agentes destinados a velar por el cumplimiento de estas órdenes. Ha insistido además en que en este caso concreto la juez actuó con celeridad pero falló la Guardia Civil.
Encarnación Rubio, segunda mujer muerta a manos de su pareja en lo que va de año en la provincia de Granada, había denunciado con anterioridad a su esposo por malos tratos y amenazas de muerte, por lo que una orden judicial le impedía acercarse a ella a menos de cien metros, aunque según sus vecinos su marido la incumplía casi a diario. Ambos tenían tres hijos, aunque uno de ellos falleció el pasado diciembre en un accidente de tráfico, lo que había dejado muy afectada a Encarnación, que hoy ha sido enterrada precisamente junto a su hijo en el cementerio de la localidad granadina de Cúllar Vega.
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