Los tres niños que murieron en el incendio de Lleida estaban solos cuando se declaró el fuego
La consejera de Interior ha explicado que el origen del siniestro podría haber sido una sobrecarga en la red eléctrica, la calefacción o la cocina
La consejera del Interior, Montserrat Tura, ha confirmado que los tres niños, de entre cuatro y seis años de edad, que murieron ayer durante el incendio de su casa en Balaguer, Lleida, estaban solos en el edificio cuando se originó el fuego. Los tres pequeños vivían con los padres y una abuela.
Tura se ha desplazado a la capital de la Noguera para reunirse con el alcalde de la localidad y miembros del cuerpo de Bomberos y los Mossos d'Esquadra. La consejera ha confirmado que "el incendio se originó en algún punto del primer piso y la estrechez del immueble provocó una rápida propagación de las llamas". "La policía científica se encuentra en estos momentos recogiendo pruebas para encontrar el foco donde se inició el incendio", ha explicado Tura.
Respecto a las causas, la consejera ha destacado que aún "no están confirmadas aunque podría haber sido por una sobrecarga en la red eléctrica, la calefacción o la cocina". Miembros del colectivo gitano, al que pertenecían los fallecidos, también han apuntado a una bombona de butano como fuente del incendio.
Los Mossos d'Esquadra continúan intentando esclarecer desde primeras horas de hoy las causas del incendio. Fuentes de los Mossos d'Esquadra han indicado que el edificio en el que se produjo el trágico suceso, situado en el número 28 de la calle Torrente, en el casco histórico de Balaguer, está precintado y custodiado por una patrulla de la policía autonómica y que esta mañana técnicos de este cuerpo han iniciado la investigación de las causas del mismo. Durante el día de hoy se realizará la autopsia a los tres cuerpos de los menores.
Desalojo de cuatro edificios
El suceso ha conmocionado a la ciudad de Balaguer, cuyo alcalde, Miquel Aguilar, destacó anoche la "rápida actuación" de los Bomberos de la Generalitat, que debieron desalojar cuatro inmuebles situados en la misma calle del edificio siniestrado, concretamente los inmuebles número 22, 24, 26 y 30 de la calle Torrente, que tienen entre una y dos plantas.
Al parecer, el incendio se extendió rápidamente a las plantas primera y segunda de la vivienda afectada, donde se encontraban los menores, debido a que el edificio tenía vigas de madera, según han indicado los Bomberos de la Generalitat.
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