La policía detiene a tres presuntos etarras en Pamplona por la explosión de un coche en 1999

El juez Baltasar Garzón ordenó anoche la detención de Ibai Ayensa Laborda, Iker Isiegas Garisoain y Sergio Medina Azanza, a quienes la Policía Nacional interceptó en Pamplona. Los presuntos miembros de ETA fueron detenidos por su supuesta relación con la explosión de un artefacto que trasladaban en un coche el 29 de diciembre de 1999 en la capital navarra.

De este modo, Ibai Ayensa, que había sido puesto en libertad el pasado 23 de febrero por el juez Guillermo Ruiz Polanco tras cumplir dos años de prisión preventiva y no decretarse la prórroga correspondiente, vuelve a prisión, aunque por una causa distinta.

A los tres detenidos se les relaciona con la explosión de un coche en el barrio pamplonés de Ermitagaña el 29 de diciembre de 1999. Aquella noche, Sergio Medina resultó herido después de que el artefacto explosivo que transportaba en un coche estallara en la calle Francisco Alesón de la capital navarra. La policía pensó en aquel momento que Medina estaba acompañado por Joseba Miren Sainz de la Higuera, alias El Abuelo, considerado el primer instructor de los grupos de violencia callejera que actuaban en Navarra. Sin embargo, la investigación ha descartado esta posibilidad y ha concluido que el acompañante de Sergio Medina Azanza era Ibai Ayensa. La bomba que entonces manipulaban los presuntos terroristas les había sido entregada por otro de los detenidos anoche: Iker Isiegas Garisoain.

La implicación de los ahora detenidos en el suceso ocurrido en 1999 se confirmó a través de la documentación incautada al ex jefe del aparato militar de ETA Ibon Fernández Iradi, alias Susper, en la localidad francesa de Tarbes en diciembre de 2002.