El Gobierno apuesta por asumir el mando del centro-sur de Irak "en el marco de la OTAN"
El Ejecutivo aún no ha decidido qué hará con las tropas en el caso de que la Alianza no participe en el despliegue
El Gobierno español apuesta por hacerse cargo de la División Multinacional Centro-Sur de Irak "en el marco de la OTAN". Así lo ha asegurado hoy la ministra española de Exteriores, Ana Palacio, al referirse al fin del mandato de Polonia sobre el contingente desplegado en esta zona, que se producirá el próximo 30 de junio y que debería pasar a manos de España. Sin embargo, el Gobierno no tiene aún decidido qué hará cuando llegue esa fecha.
Palacio ha explicado que "el Gobierno no rechaza la responsabilidad" de asumir el mando de las fuerzas multinacionales desplegadas en la región centro-sur de Irak, región en la que se encuentran ahora desplegadas y que está dirigida por Polonia. Sin embargo, también ha expresado su esperanza de que España asuma ese mando "en el marco de OTAN". Según la ministra, el Gobierno trabajará "para que la OTAN participe con mayor protagonismo", porque apuesta "por la participación multilateral y por la presencia multilateral, y por tanto con la presencia de OTAN". Si a partir del 30 de junio, cuando concluye el período de mando polaco de la División Multinacional, España se hiciera cargo de esta responsabilidad, debería aumentar en mil efectivos sus 1.300 militares integrados actualmente en la Brigada Plus Ultra II, como publica hoy >b>EL PAIS.
Sin embargo, el Gobierno no tiene aún decidido qué hará con el contingente español en caso de que la Alianza Atlántica decidiera no participar en el despliegue militar en Irak. La propia ministra ha declarado que "si no va la OTAN, veremos". Esta misma postura es la que ha ofrecido hoy el ministro portavoz, Eduardo Zaplana, que ha dicho que la decisión de prorrogar la misión militar de España en Irak aún no está tomada. Por su parte, Javier Arenas, vicepresidente segundo, ha asegurado que el Gobierno no ha adoptado "ninguna decisión" sobre la posibilidad de aumentar la presencia de efectivos españoles en Irak que "no pase por los contingentes actuales", lo que haría inviable asumir el mando polaco.
La "irresponsabilidad" del PSOE
Mientras, el Gobierno ha criticado la propuesta que ayer adelantaba el secretario general del PSOE de que, si sale elegido presidente el 14-M, ordenará el regreso de las tropas españolas si la ONU no se hace cargo de la situación a partir del 30 de junio. El portavoz del Ejecutivo, Eduardo Zaplana, ha criticado la falta de coherencia del líder socialista, que respaldó la continuidad de las tropas españolas en este país en el último debate sobre este asunto celebrado en el Congreso el pasado 2 de diciembre, cuando dijo que "si abandonamos Irak a su suerte, el desastre humano puede tener proporciones gigantes". En todo caso, Zaplana ha restado trascendencia al anuncio de ayer de Zapatero: "No lo toma nadie en serio" porque "cada día dice una cosa".
Según Zaplana, el candidato socialista comete, "una vez más", una "gran irresponsabilidad" por "decir en cada momento lo que cree que le puede interesar más", cuando "hay asuntos en los que hay que mantener un mínimo de coherencia y una posición más o menos firme". A juicio de Zaplana, la promesa del candidato socialista se queda en nada porque "la ONU no se hace cargo de nada" y sólo "puede tener presencia, y eso es bueno". "Quien deseamos todos que se haga cargo es un gobierno legítimo y democrático de los propios iraquíes, que recuperen la libertad, la convivencia, la paz y que puedan encauzar su futuro con un gobierno legítimo y propio", ha dicho a continuación.
También el vicepresidente segundo del Gobierno, Javier Arenas, se ha extendido en críticas hacia la promesa de Zapatero, diciendo que "sólo se puede hacer desde la inmadurez, el desconocimiento y la irresponsabilidad" y "desde la ausencia de lo que significa el respeto a los compromisos internacionales, en este caso, Naciones Unidas".
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