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Reportaje:LA HORA DE LA GUERRA | Movilización ciudadana

Cientos de miles de personas claman en las calles contra el inicio de la ofensiva militar

Miles de manifestantes se concentran en toda España en protesta por la postura del Gobierno.- Los alumnos colapsan los centros de Madrid y Barcelona

Una vez comenzada la ofensiva contra Irak, la respuesta ciudadana se ha producido de forma espontánea y contundente. Si esta mañana miles de estudiantes universitarios y de secundaria se han lanzado a las calles de las principales ciudades, esta tarde les han tomado el relevo cientos de miles de ciudadanos anónimos, que recorren las calles para expresar su oposición por el apoyo español a la guerra recién empezada.

Convocados para las ocho de la tarde en todas las ciudades de España, decenas de miles de personas se han concentrado para hacer visible su postura contraria a la actitud del Gobierno, alineado con EE UU en una guerra considerada ilegal por la opinión pública.

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En Madrid, varios miles de personas -más de 500.000 según los organizadores y 9.000 según fuentes policiales- han tomado la Puerta del Sol y durante tres minutos han guardado silencio en un acto abierto con la lectura de un poema por Luis Pastor, seguido de otro, dedicado a las madres, por la poetisa iraquí Bahira Abdulatif. En Barcelona, hasta 35.000 personas, según la Guardia Urbana, han participado en los actos que se han llevado a cabo durante el día, incluyendo la concentración de la tarde y las manifestaciones de estudiantes de la mañana.

Precisamente por la mañana tenían lugar los primeros actos de protesta, iniciados por los universitarios y alumnos de secundaria. En Madrid, los estudiantes han salido de sus facultades y han tratado de llegar al Congreso de los Diputados, aunque han sido detenidos en la Carrera de San Jerónimo por unidades antidisturbios, que han lanzado pelotas de goma, causando al menos dos heridos.

Las manifestaciones, surgidas espontáneamente desde las facultades, donde estaban previstas concentraciones, han dirigido sus pasos hacia la Puerta del Sol, desde donde han partido hacia el Congreso. Los estudiantes han cortado algunos de los principales ejes de la capital, como la Plaza de Cibeles o las calles de Alcalá, Goya, la Castellana, el Paseo del Prado y Princesa, provocando en algunos casos grandes retenciones, sobre todo en la entrada a Madrid por la carretera de A Coruña, que llega a Moncloa.

En Barcelona, los alumnos se han concentrado frente a la sede del PP, lanzando huevos, botellas, tomates, pilas y latas de conserva contra el edificio. Varios centenares de estudiantes se han congregado frente a la sede del PPC, en la calle Urgell, procedentes de las diversas manifestaciones contra la guerra que se han sucedido durante la mañana. Un grupo de estudiantes se han encaramado a un andamio situado en el edificio adyacente y ha lanzado botes de pintura sobre los agentes. Como en el caso de Madrid, los estudiantes han cortado la autopista A-7, causando grandes retenciones de hasta 20 kilómetros.

También en Sevilla, unas 2.000 personas, según la Policía Nacional, se han manifestado espontáneamente contra la guerra desde la Plaza Nueva hasta la Plaza de España, cortando el tráfico rodado por las principales avenidas de la ciudad. Los manifestantes han gritado consignas en contra del PP, cuya sede ha sido bombardeada con naranjas, y EE UU, a los que han calificado de "canallas y asesinos".

Los estudiantes han marchado también sobre Alicante, Oviedo, Zaragoza, Lleida, Granada -en la ciudad andaluza, unos 5.000 alumnos han apedreado una sede del PP-, Palma, Santiago de Compostela, Málaga, Palma de Mallorca, Logroño, Tarragona y otras ciudades.

Dos millones de firmas

Paralelamente a las manifestaciones, representantes de diversos colectivos sociales, pacifistas, asociaciones de actores, sindicatos y organizaciones ciudadanas, englobados en la Plataforma contra la Guerra, han entregado esta mañana en el registro del Congreso de los diputados de Madrid 800 paquetes con dos millones de firmas contra el ataque a Irak recogidas durante los últimos quince días en toda España.

La presentación de las firmas ha estado precedida por un acto simbólico celebrado en la escalinata principal del Palacio del Congreso, en el que varios cientos de activistas, vestidos con camisetas blancas en las que se podía leer No a la guerra", han alzado con sus brazos los legajos que contenían los documentos firmados.

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