Garzón interroga al último de los detenidos en relación con el aparato de captación de ETA

El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha dictado el ingreso en prisión incondicional de once de los 15 detenidos el pasado miércoles en el País Vasco y Navarra por su presunta vinculación con el aparato de captación de ETA, a quienes imputa un delito de colaboración con banda armada, según han informado fuentes jurídicas. El juez interroga hoy a otro de los detenidos y anoche dejó en libertad a otros tres.

El magistrado ha adoptado esta medida a instancias del fiscal Pedro Rubira después de tomar declaración durante todo el sábado a catorce de los arrestados, tres de los cuales quedaron en libertad a primera hora de la noche de ayer después de que el representante del ministerio público no pidiera la adopción de ninguna medida cautelar contra ellos. Se trata de Dolores Ganzarain, Jose María Arruti y Maria Colera Intxausti, todos ellos detenidos en Guipúzcoa.

Entre quienes han ingresado en prisión se encuentran los ex dirigentes de Haika Aiora Epelde y Arkaitz Rodríguez, que en la actualidad se encontraban en libertad provisional después de haber sido arrestados el 6 de marzo de 2001 por orden del juez Garzón en el curso de una operación contra esta organización juvenil.

Además de Epelde y Rodríguez, detenidos el pasado miércoles en San Sebastián, han sido encarcelados Mikel Jauregi, Iñaki Ramos y José Lezama, arrestados en Vizcaya; Asier Ortiz de Guinea y Aiala Manrique (en Alava); y Unai Redin, Tomás Insausti, Mikel Pardo y Ainara Calvo (en Navarra). Todos ellos fueron captados para distintas tareas de la organización terrorista y tenían distinto grado de responsabilidad en ellas. Uno de los detenidos contribuyó, a su vez, a captar a los otros miembros mientras que algunos de los otros arrestados recopilaron y elaboraron información, además de facilitar pisos a la organización terrorista.

Información sobre concejales

El juez está tomado declaración a la última detenida, Arritokieta Andrés Urritikoetxea, arrestada el jueves en San Sebastián y quien, según se desprende de la documentación incautada, se habría encargado de recabar información sobre concejales.

Todos los detenidos figuraban en un listado intervenido al dirigente etarra Ibón Fernández de Iradi, "Susper", detenido en Francia y que posteriormente se fugó de la comisaría de Bayona, en el que había una relación de sesenta personas susceptibles de ser captadas para colaborar con la banda terrorista o encargadas de reclutarlas. Algunos de ellos, según fuentes de la investigación, estaban ya dispuestos a integrarse en comandos operativos de la banda. A estos detenidos se les incautaron, teléfonos móviles, material informático y documentación.