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La policía detiene a 77 integrantes de una banda que robaba cabinas telefónicas

La operación se ha desarrollado en cinco ciudades españolas

La Policía ha desarticulado una "gran organización" de ciudadanos rumanos especializada en el robo de cabinas telefónicas en diversas ciudades de España, según una nota difundida hoy por la Dirección General de la Policía. La operación Broca se ha saldado en total con 77 detenciones.

La operación, que todavía continúa abierta, se ha llevado a cabo principalmente entre diciembre de 2002 y enero de este año en las ciudades de Barcelona, Valencia, Castellón, Málaga y Valladolid dentro del Plan de Lucha contra la Delincuencia elaborado por el ministerio del Interior.

Los detenidos se organizaban en diferentes grupos formados por un mínimo de tres y un máximo de seis individuos que se intercambiaban unos con otros en los diferentes grupos establecidos por la geografía española. En sus desplazamientos las líneas de autobuses de largo recorrido y se alojaban en hostales o pensiones en las que se registraban utilizando documentaciones falsas rumanas o italianas.

Método del taladro

La organización llevaba a cabo su actividad delictiva con el método del taladro que consiste en hacer un agujero con esta herramienta en la parte superior derecha de la tapa del arca de la cabina elegida después de comprobar, con la introducción de unas monedas, que la hucha estuviera suficientemente llena. Una vez hecho el orificio, los detenidos introducían un alambre en forma de gancho para desbloquear el dispositivo de seguridad y lograr la apertura de la cerradura lateral.

A continuación, se procedía a la apertura del arca utilizando una llave original sustraída a algún recaudador de la compañía telefónica. Una vez llevada a cabo la sustracción de la hucha, los ladrones intentaban que no se detectara la manipulación de la cabina tapando los agujeros realizados con el taladro con masilla o plastilina. El dinero robado era usado en parte para mantener la infraestructura dentro del país, y el resto era remitido fuera de España, principalmente a Rumanía, a través de empresas de envío de dinero.

En total, según la policía 100.000 cabinas fueron asaltadas durante 2002 con el método del taladro. Como en España hay unas 60.000, cada cabina fue asaltada más de una vez como promedio. En conjunto, el perjuicio para la Compañía Telefónica supuso un monto cercano a los 25 millones de euros.

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